Llega la biblioteca de Luis González de Alba al ITESO

Esta semana, la universidad jesuita ITESO recibió el legado bibliográfico del escritor Luis González de Alba. Poco más de 60 cajas de libros salieron de su casa, en la calle de Vidrio, para que la comunidad universitaria y los jaliscienses puedan tener acceso al material que dejó el intelectual mexicano más irreverente de las últimas décadas.

El encargado de entregar este legado fue Adrián González de Alba, sobrino y albacea de Luis, quien se hizo acompañar del historiador Alonso Hernández, amigo personal del escritor y director de Archivos y Memorias Diversas en la Ciudad de México.

Luis González de Alba nació en San Luis Potosí pero siempre se consideró jalisciense. Migró de niño al Estado, y su familia siempre estuvo aquí. Sin embargo, el escritor hizo una carrera como intelectual en los círculos de élite de la Ciudad de México, por lo que llama la atención que su legado se quede en Guadalajara.

“Lo dejó por escrito. Dejó por escrito que quería que, después de que la familia escogiera algunos títulos, claramente no para vender, el grueso de su biblioteca fuera a dar al ITESO. Y ahí, muy lindos, no sólo aceptaron recibir los libros, sino crear un fondo con su nombre”, dice su sobrino Adrián. “Luis pasó los últimos 20 años de su vida en Guadalajara, pero además,  él había estudiado en el Instituto de Ciencias, que era una institución jesuita. Yo creo que tuvo una reconciliación con los jesuitas, por un lado, pero además tenía muy buenos amigos en el ITESO, como Rogelio Villarreal”, dice Adrián González de Alba.

Entre los libros, cuenta el también escritor y articulista, hay desde enciclopedias hasta libros especializados. Va la enciclopedia británica, actualizada hasta el 2004, novelas de autores mexicanos, libros de genética, de mitología griega, de política y de física, entre otros. Además, su colección de revistas como American Scientist o Skeptical Inquirer y algo muy especial: su fichero bibliográfico.

Un fichero contra lo políticamente correcto

El historiador Alonso Hernández tuvo oportunidad de revisar el fichero de Luis González de Alba antes de que se empacara para formar parte del patrimonio del ITESO y advierte que en esas tarjetas se encuentra un tesoro revolucionario que nutrió los artículos y los libros de González de Alba desde poco antes de 1975.

“Se encontraron fichas bibliográficas que hablan sobre el trabajo de reflexión y pensamiento de Luis sobre temas como diversidad sexual, género, feminismo; casi todo era muy enfocado a sus artículos, que se vieron reflejados en ‘El derecho de los malos’, ‘Niña o niño’, o ‘Bases  biológicas de la bisexualidad’, que fue el primer libro científico que abordó el tema de la bisexualidad en México, desde una perspectiva mexicana”, dice Hernández.

La importancia de esas fichas, explica el historiador, reside en que permiten ver el proceso intelectual de Luis González de Alba.
“Esas fichas nos permiten leerlo mejor defendiendo a la gente de la censura, defendiendo a las diversidades sexuales, a las mujeres, y poniendo algunos puntos que hoy nos alarman como el conservadurismo del feminismo radical.  Luis González de Alba preveía desde los 80 que lo políticamente correcto iba a terminar por darle un giro a la defensa de los derechos tanto de género como de diversidad sexual. El legado que se le da al ITESO es fundamental para quienes trabajan estos temas”.

Además, explica el también activista, estos ficheros revelan a un escritor que iba dando “golpes a la conciencia” al hablar de sus emociones en artículos periodísticos y libros en los que se colaban sus parejas no heterosexuales.