En el país hay más de 2 mil defunciones anuales en promedio y un aproximado de 68 casos anuales en el estado de San Luis Potosí
Se considera como una enfermedad con baja frecuencia, pero el cáncer infantil es la principal causa de muerte por enfermedad entre los niños y adolescentes cuyas edades fluctúan entre los 5 y los 14 años de edad, registrándose en nuestro país 2 mil defunciones anuales en promedio y un aproximado de 68 casos anuales en el estado de San Luis Potosí, así lo dio a conocer Evelyn Lizette Sánchez Ramos, médica supervisora del Programa de Cáncer y Responsable del Registro de Cáncer en Niñas, Niños y Adolescentes de la Secretaría de Salud de San Luis Potosí.
Precisó que a nivel mundial, el cáncer representa un problema de salud pública y tras su diagnóstico en niños y adolescentes, la enfermedad tiene un impacto alto, no solo en los pacientes quienes físicamente padecen los síntomas, sino hasta en su familia que a su lado también presenta afectaciones de tipo emocional y económico.
Detalló que los niñas, niños y adolescentes diagnosticados con cáncer infantil tienen un pronóstico más alentador de recuperar su salud que el de la población adulta, pues a través de la atención que es brinda la Secretaría de Salud se ha logrado disminuir el impacto económico tan fuerte que la enfermedad representaba para las familias potosinas, ya que los costos de los tratamientos y en general de su atención médica, son financiados a través del Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos.
Indicó que en el estado anualmente se capacita al personal de los Servicios de Salud en temas concernientes a cáncer infantil, para que sean estos servidores públicos quienes realicen la búsqueda intencionada de signos y síntomas en la población infantil y con ello se pueda realizar una referencia médica oportuna.
Asimismo, pidió a los padres de familia de niños, niñas y adolescentes potosinos, estar pendientes de que éstos no presenten fiebre recurrente o persistente, palidez, puntitos rojos y moretones sin causa, sangrados en encías y nariz, debilidad, pérdida de peso, dolor de cabeza intenso y persistente, ausencia de reflejo rojo en el ojo, presencia de estrabismo o que hagan lo que comúnmente se conoce como “bizcos”, que no tengan presencia de ganglios o bolitas en cuello, axilas, ingles o bien que no tengan presencia de masas en el abdomen o presenten dolor intenso de huesos, pues todos estos son síntomas de alerta de posible presencia de cáncer infantil.
Finalmente, precisó que la niñez y la adolescencia son una etapa crítica, por lo que una alimentación saludable, realizar 30 minutos de ejercicio al día, el uso de protector solar y manga larga, la vacunación contra virus de papiloma humano y virus de hepatitis B, evitar el consumo de alcohol y tabaco así como el uso de condón y practicar sexo seguro, podrían ser factores protectores contra el desarrollo de cáncer.