Cuando se anuncien las nominaciones a los Premios de la Academia, el martes por la mañana, puede que sea un breve momento de celebración para una industria en llamas por los escándalos de acoso sexual y protestas por desigualdad de género. Pero quizá haya más leña que echar al fuego.
Y es que a la situación que permea en la industria se suman dos interrogantes que podrían calentar aún más el ambiente:
¿Cuál será la influencia de “Me too” en las nominaciones? Las nominaciones al Oscar de Kevin Spacey a Dustin Hoffman se han esfumado, y en ese camino podría estar la de James Franco, quien podría contender por su trabajo en “The Disaster Artist”; de hecho, el histrión, quien fue señalado de abusador, ya obtuvo el Globo de Oro.
Muchos votos ya habían sido emitidos cuando las acusaciones en su contra llegaron; sin embargo, no hay que olvidar que muchos miembros de la Academia esperan hasta el último minuto para emitir su voto.
LA SEGUNDA INTERROGANTE
¿Regresará la polémica Oscar-so-white?Aunque el año pasado triunfó “Moonlight”, las nominaciones de este año parecen no estar encaminadas a tener candidatos de razas no blancas. Aunque Mary J. Blige y Octavia Spencer podrían marcar la diferencia. Incluso, en la categoría de Mejor película la cinta de “Get Out”, también podría ser el factor representativo y así evitar que esta premiación sea “so-white”.