De nueva cuenta el equipo del Atlético de San Luis sale del estadio Alfonso Lastras Ramírez abucheado, por su afición debido al empate que consiguió ante Tampico Madero a cero goles lo que causo la molestia de los presentes.
No hay duda que este técnico español José Molina no da una con el equipo, y los aficionados siguen molestos, por los pésimos resultados que ha entregado.La escuadra de dirige José Molina tuvo su primera llegada a los pocos minutos de juegos de que inicio el partido con una jugada de Jonathan Espericueta quien dio un pase hacia David Castro quien saco disparo potente que paso a un lado del travesaño sin lograr su objetivo.
Los minutos seguían en donde el equipo de casa seguía con la intención de hacer el gol que les diera la ventaja, pero enfrento a un equipo tamaulipeco muy bien plantado que no les permitía hacer nada.
Jorge Sánchez un jugador peligroso seguía buscando hacer daño a Tampico, por lo que tuvo llegadas claras de gol que desafortunadamente no pudo terminar en gol.Pablo Olivera un jugador con calidad de nueva cuenta le daba peligro a su equipo con llegadas claras, pero sin concretarlas debido a que sus disparos eran muy desviados, sin dirección de gol.Tampico Madero por momentos quería hacer algo de futbol en el estadio Alfonso Lastras Ramírez, pero su futbol era poco creativo, y desafortunadamente para ellos no lograron hacer daño, por lo que al final se fueron al descanso de la primera parte con los cartones blanco sin ventaja para nadie.
SEGUNDO TIEMPO
La segunda parte dio inicio con un partido muy flojo en donde los dos equipos parecía que no quería encontrar la victoria, pues su futbol era totalmente desastroso si son ni son.Atlético de San Luis por momentos quería hacer alguna jugada de peligro, pero no tenia la capacidad para crearlo debido a que Tampico Madero estaba bien plantado, y no les permitía hacer nada.Los minutos seguían su marcha, y el partido estaba en un momento de aburrimiento el cual le empezó a pesar a los aficionados que se dieron cita al estadio, y comenzaron a abuchear, y chiflar a su equipo.
Al final el tiempo se consumió, y se dieron los 90 minutos sin que ninguno de los dos equipos lograr hacer daño, por lo que se quedaron con el empate a cero goles lo que enojo a los aficionados quienes al final le brindaron una música de viento al entrenador José Molina quien salió con la cabeza agachada.