El nuevo entrenador de la UD Las Palmas, Paco Jémez, confirmó que habrá cambios en la plantilla, porque el jugador «debe saber que también puede perder su puesto de trabajo si las cosas no van bien», y no solo los entrenadores, como ocurre tradicionalmente.
El tiempo en el que solo le cortaban la cabeza al entrenador se terminó. Ahora llega una época en el que si hay que prescindir de algún jugador, lo haré… (…) Ya está bien de que solo los entrenadores paguemos por esto», dijo Paco Jémez.
Por otra parte, se refirió al aspecto disciplinario, un asunto, a su juicio, «muy socorrido» cuando las cosas «no van bien», y fue tajante: «La situación es tan comprometida y complicada, que no voy a permitir que nadie fuera del terreno de juego nos la haga más difícil».
Jémez cree que deben «demostrarle a la afición» que les «importa» la situación actual, pero primero deben darle motivos, y aunque insiste en que «hay que arreglar muchas cosas», asegura que no viene a ser «el detective ni el policía de nadie», porque los jugadores saben «qué tienen que hacer dentro y fuera del campo», y para eso tienen que hacer «sacrificios en la vida privada y en la deportiva», pero si surge algún problema, «lo solucionaremos», avisa.
Manifestó que debe «cambiar muchas cosas» cuando comience a trabajar con los jugadores, en la «situación límite» que vive el equipo amarillo, colista de LaLiga, tras 17 jornadas disputadas.