El Director de cine James Cameron regresa al Titanic

  • A 20 años del lanzamiento de la cinta, National Geographic y Cameron se aventuran nuevamente en la historia del barco de la línea náutica

En diciembre de 1997 el Titanic atracó en las salas de cine del mundo y se  convirtió en un fenómeno que recaudó más de dos mil millones de dólares en el tiempo que se mantuvo en cartelera, además de 11 Oscar. Si bien la historia de amor entre Jack y Rose, creada por James Cameron y enmarcada en la tragedia del barco más famoso del mundo conmovió al público, también su espectacular producción despertó -aún más- el interés por saber a ciencia cierta qué sucedió la noche del 15 de abril de 1912.

A 20 años del lanzamiento de la cinta, National Geographic y Cameron se aventuran nuevamente en la historia del barco de la línea náutica White Star que ha inspirado a la exploración submarina, la escritura de libros y la creación de documentales, tratando de dar respuesta a las preguntas que continúan surgiendo sobre el suceso.

En Titanic: 20 años después, documental que se estrena hoy, Cameron -quien es el productor del mismo- desmenuza su experiencia al realizar la cinta, los retos que tuvo que enfrentar, la investigación que realizó, y da una nueva visión de aquellas partes de la trama que tuvo que sacar en el momento de la edición, además de incluir los testimonios de los descendientes de personajes como John Jacob Astor, Molly Brown e Isidor e Ida Straus.

«Una vez que tuvimos la película hecha no podíamos imaginar quitarle algo. En términos de cosas que me hubiera gustado mantener y que se quitaron respondió más a una limitación de tiempo que a otra cosa; de hecho, pienso que todo respondió a eso. Construimos este enorme set y los modelos… y los rompimos, los hundimos; también filmamos muchas escenas con personajes históricos, que en realidad no son personajes, son personas reales.

«Momentos como Ida e Isador Straus cuando ella le dice que se va a quedar a bordo del barco con él y a morir con él porque han vivido por mucho tiempo juntos… eso lo filmamos y después lo tuvimos que sacar en la posproducción. Una de las cosas más bonitas de este especial es que vamos a mostrar un poco de esas cosas que quedaron fuera que tienen que ver con los personajes históricos asociados con el hundimiento», señaló Cameron en entrevista.

Para la realización de la cinta, el cineasta se rodeó de expertos en el tema quienes fueron llevando a Cameron a través de sus propias investigaciones para que así pudiera dar forma a la historia del trasatlántico que yace en la profundidad del Atlántico Norte.

De igual forma, en esta ocasión Cameron reunió un equipo de especialistas entre los que destaca el Dr. Robert Ballard -explorador residente de National Geographic y quien descubrió los restos del Titanic en 1985-, Parks Stevenson -historiador, documentalista e ingeniero en sistemas navales-, Don Lynch -historiador y escritor- así como Ken Marschall -historiador visual y el creador más importante del mundo de obras de arte del Titanic.

«Tuve unos grandes consejeros que no fueron sofocantes ni tampoco decían que lo sabían todo, estaban dispuestos para admitir que existían algunos vacíos en el conocimiento general de lo que había sucedido; fueron muy abiertos a ver las cosas desde ángulos nuevos y distintos.

En ese sentido me di la libertad de sacudir un poco las cosas y desafiar algunas de las conclusiones históricas que se habían hecho y que yo quería responder.

«Antes de filmar la película, el año anterior, habíamos hecho unas 12 inmersiones al barco y revisado todo tipo de cosas que no se habían ex-plicado por la sabiduría convencional de la comunidad del Titanic, lo que pusimos en pantalla fue un compuesto entre lo que se sabía, lo que se había aceptado y un montón de ideas nuevas que eran un poco radicales. Era de cierta forma una provocación a la comunidad del Titanic para que vieran las cosas de otra forma, las cuestionaran y les dieran respuesta, lo cual provocó una serie de investigaciones de nuestra parte y de otros investigadores», añadió.

Si bien la cinta llevó un gran trabajo de producción e investigación, también requirió de un alto nivel de actuación por parte del elenco y extras que participaron en ella ya que tuvieron que enfrentar, de la forma más segura po-sible, situaciones extremas como filmar dentro de agua helada, correr por pasillos, chocar con elementos propios de la cubierta y, de alguna forma, sobrevivir al desastre del hundimiento del Titanic.

«Siempre hay un factor X cuando estás haciendo una producción tan grande como lo fue Titanic, ese factor, como lo llamo, es el riesgo de lo que puede pasar y que no lo tienes medido y visualizado. Tienes a los mejores en efec-tos, en el equipo de dobles y siempre existe una posibilidad de que algo pase. Nunca dudé en pedirle a alguien que hiciera algo, si hubiera dudado no lo hubiera filmado.

«La escena en la que Jack y Rose son arrastrados por una puerta de metal que los sigue mientras cientos de toneladas de agua se vienen detrás de ellos, era peligrosa. Había algo que me decía que algo podía salir mal, así que caminé durante 20 minutos el set donde la hicimos para darme cuenta de que todo estaba en orden antes de rodar; en el último segundo decidí ponerles a ellos y a los extras cables de seguridad para que fueran lanzados fuera del set de la manera más segura», compartió el cineasta.