Desestima Trump hacer campaña con candidato acusado de acoso

Donald Trump no tiene previsto hacer campaña junto a Roy Moore, el candidato republicano al Senado por Alabama que fue acusado de abusar sexualmente de varias adolescentes hace unas cuatro décadas.

El presidente de Estados Unidos evitó pedir la dimisión de Moore, como sí han hecho los líderes republicanos en el Senado, y arremetió reiteradamente contra Doug Jones, el rival demócrata de ese polémico candidato en las elecciones especiales programadas para el próximo 12 de diciembre en Alabama.

Trump, que durante la campaña electoral de 2016 también fue acusado por varias mujeres de haberse propasado con ellas, pareció defender a Moore la semana pasada, al asegurar que el candidato había negado repetidamente las acusaciones en su contra.

Pese a ese apoyo tácito, el mandatario no tiene planeado ningún viaje a Alabama para hacer campaña a favor de Moore, y su agenda no le permite encajar esa actividad antes de las elecciones legislativas.

Lo anterior lo afirmó la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, en su conferencia de prensa diaria.

La semana pasada, el presidente había adelantado a los periodistas que pronto les revelaría si planeaba viajar a Alabama, donde las encuestas muestran una ajustada carrera entre Moore y Jones pese a la naturaleza tradicionalmente conservadora del estado.

Este fin de semana, el magnate aumentó sus críticas contra Jones, al asegurar en Twitter que lo último que necesita Alabama y el Senado es una victoria del aspirante demócrata y lo calificó de débil.

«¡Jones sería un desastre!», escribió Trump en Twitter el domingo.

El mandatario también recordó que, durante las elecciones primarias republicanas en Alabama en septiembre, él no respaldó a Moore, sino a Luther Strange, el aspirante preferido por el aparato del partido, pero eso no fue suficiente, y ahora no se puede permitir que los demócratas ganen estas elecciones.

Moore, un exjuez de 70 años, está alineado con la llamada «derecha alternativa» que busca revolucionar el Partido Republicano, y ha negado rotundamente las acusaciones en su contra que han hecho ocho mujeres, entre ellas varias que tenían entre 14 y 18 años cuando ocurrieron los hechos, en la década de 1970.

Varios senadores republicanos han advertido de que podrían votar para expulsar a Moore del Senado en caso de que gane las elecciones.