Supresión del Juzgado Primero Penal a partir del 1 de diciembre

El próximo 1 de diciembre entrará en vigencia una nueva etapa de reestructuración en el Poder Judicial del Estado con la supresión del Juzgado Primero Penal del primer distrito judicial y la entrada en funciones del Juzgado Segundo de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de la Región Centro-Altiplano, ambos con sede en la ciudad de San Luis Potosí.

El magistrado Juan Paulo Almazán Cue, Presidente del Supremo Tribunal de Justicia y del Consejero de la Judicatura; los Consejeros Juan Carlos Barrón Lechuga, José Refugio Jiménez Medina y Carlos Alejandro Ponce Rodríguez sostuvieron una reunión con el personal del Juzgado Primero Penal y el que integrará el Juzgado Segundo de Ejecución para informarles de estas medidas de reordenamiento y de su respectivo cambio de adscripción por reorganización, motivo por el cual sus derechos laborales no se verán afectados.

Con motivo de la entrada en vigor del sistema acusatorio y oral, el pasado mes de febrero inició la depuración de los Juzgados Primero y Octavo Penal, con lo que se inició su proceso de extinción como una acción tendiente a la consolidación del nuevo sistema de justicia acusatorio y oral.

A la fecha, la carga de trabajo de ambos juzgados ha disminuido de forma considerable y derivado del análisis estadístico de sus actividades en el periodo de febrero a septiembre, el Consejo de la Judicatura acordó suprimir el Juzgado Primero Penal  y la carga de trabajo que mantiene será turnada al Juzgado Octavo Penal en donde se realizarán los trámites necesarios para la conclusión de dichos asuntos.

Por lo que respecta al Juzgado Segundo de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de la Región Centro-Altiplano, su creación se deriva de una necesidad advertida para conocer de estas resoluciones dictadas por los jueces penales de la capital y de los jueces de primera instancia de los distritos judiciales que tienen cabecera en los municipios de Matehuala, Cerritos, Guadalcázar, Venado, Salinas y Santa María del Río.