Universitarias colaboran en restauración de templo en Taxco, Guerrero

Estudiantes de séptimo semestre de la carrera de Conservación y Restauración de Bienes Culturales Muebles (CRBCM) de la Facultad del Hábitat- UASLP, laboraron durante dos semanas en el templo principal de Taxco, donde restauraron seis retablos.

Las jóvenes, Isabel González, Melissa Castillo Aguillón, María Gabriela Juárez López, Beatriz Sánchez Medlich, María del Rosario Salgado Girón, María José Medellín Mattar; María de Lourdes Martínez Luna, Eny Denni-se Hernández Zuñi-ga, Jessica Marentes Pastrana y Astrid López Almaguer; y el catedrático Marco Antonio Moreno; platicaron los pormenores de su estancia por dos semanas en esta entidad y el trabajo de restauración efectuado.

Detallaron que su labor se enfocó en un proyecto de conservación emergente en el templo de Santa Prisca y San Sebastián, en Taxco, Guerrero, construido en el año de 1750, “es un templo reconocido a nivel Latinoamérica por su carga ornamental con estilo churrigueresco. Trabajamos en seis de nueve retablos realizados con madera y laminados de oro”.

Estos trabajos fueron tomados por el INAH como prácticas profesionales de las estudiantes, quienes fueron seleccionadas internamente en la facultad por ser las de mejor promedio de los últimos semestres de licenciatura.mento de regreso fue tan fuerte en la parte exterior.

Los problemas encontrados fue que la ventanilla de la cúpula central al momento de regreso giro lentamente y se fracturó. También hubo pérdida parcial y completa de pináculos que se encuentra en la parte superior del templo, esto en la parte exterior”.María Gabriela Juárez López, comentó que, en la parte interior, en el piso al momento que tembló se hizo una ola con el terremoto y quedó en un desnivel. También en los muros que estaban detrás del retablo principal y laterales, había fracturas lo que provocaba inestabilidad.

“Aparte de lo sucedido con el terremoto los retablos se encontraban en un estado de mucha suciedad superficial y en la cantera”.Por otro lado, Beatriz Sánchez, platicó que fueron invitadas a participar debido que a lo largo de la preparación durante su carrera han llevado materias que son afines al trabajo.

“Llevamos la materia de maderas, escultura, policromías y dorados; los retablos del templo son de madera y tienen recubrimiento de oro, con el conocimiento que llevábamos, la guía y asesoramiento de los restauradores que nos apoyaron en todo momento pudimos realizar los procedimientos necesarios”.Y añadió: “A parte de la capacitación, también fuimos informadas sobre la relevancia del templo y los retablos.

Para la gente que vive en Taxco, es importante el mantenimiento; nos asesoraron en armar los andamios para el cuidado de las obras y seguridad dentro del lugar”.Comentaron que las actividades de la intervención emergente fueron dos, la primera basada en una consolidación en el fijado de las escamas de la lámina de oro.

Una vez realizada la consolidación se hizo limpieza mecánica. La consolidación se realiza primero para evitar más deterioro. La limpieza fue mecánica, desde la parte superior hasta la inferior, y desde lo más profundo hasta la parte más externa del retablo con bronchas suaves.

El proyecto surgió debido a la visita de revisión que realizó gente del INAH por parte del Gobierno federal, así como los pobladores a quienes les urgía volver a recuperar el turismo, por ello se platicó con el Patronato del templo, con la sociedad civil. Cabe destacar que este lugar es el principal sustento económico-turístico, por tal motivo los pobladores solicitaron un arreglo emergente.

Las universitarias estuvieron en Taxco, Guerrero, del 9 al 20 de octubre. El viaje se realizó con recursos que el gobierno otorgó a la Facultad, así como con algunas donaciones de la población de Taxco.