Renuncia Mariana Moguel al PRI-CDMX

Mariana Moguel Robles presentó su separación, con carácter de irrevocable, al cargo como presidenta del PRI de la Ciudad de México. A través de un ocio remitido al presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, la también diputada local asienta que el partido tricolor en la capital del país está listo para competir en los procesos electorales y trabajar a favor del proyecto transformador de México que ha impulsado el presidente Enrique Peña Nieto.

“Quedo a la disponibilidad para tratar los asuntos de interés y que correspondan a sus atribuciones del cargo que hasta hoy [ayer] desempeñé con absoluta imparcialidad, en apego a las leyes y a la normatividad interna”, señala Moguel en la misiva. Ahora está en manos del CEN del Revolucionario Institucional la decisión de nombrar un delegado especial con funciones de presidente, ya que será hasta la conclusión del proceso electoral de 2018 cuando sea renovado el Comité Directivo del tricolor en la Ciudad de México.

En entrevista, durante la sesión ordinaria en la Asamblea Legislativa, la diputada local dijo que hay que cerrar ciclos y que esta vez lo hace con el ánimo, el corazón y el agradecimiento a la gran oportunidad que le dio su partido en la capital. “Hemos dado grandes ciudades, me voy emocionada y seguiré desde las trincheras desde donde me corresponde; viene un periodo crucial en la Asamblea, que es la construcción de las leyes secundarias y abocarme a lo legislativo para construir las letras que darán el ritmo a la queridísima capital del país”, manifestó Moguel Robles.

Después de un año y ocho meses, la priísta se separa del cargo, luego de que su permanencia como presidenta del PRI capitalino venciera. En agosto de este año, expresó que estaba convencida de que tenía que venir la renovación y confiaba en que el Comité Ejecutivo Nacional lo mandatara y ordenara, mientras tanto ella seguiría trabajando y procurando que el partido avanzara en la capital. “Fue un periodo de grandes retos, de aprendizajes y de crecimiento, no sólo como política, sino también como mujer”, expresó. Además, recordó que la nueva dirigencia estará obligada a no perder la unidad y pluralidad que se han logrado entre las distintas corrientes del partido que de manera interna estaban confrontadas. “Se debe entender que uno solo no puede, que se necesitan equipos y aliados”, dijo.