Aculco: pueblo con encanto en el estado de México

El clima templado de este Pueblo con  Encanto recibe a quien busca des canso; para relajarse, basta una caminata por la tranquila plaza central y sus calles. También ofrece la oportunidad de acercarse y conocer a uno de los grupos étnicos más importantes del país: los otomíes, quienes habitan este lugar y aún conservan sus tradiciones, un ejemplo es su sencilla vestimenta. En Aculco todavía es visible su arquitectura tradicional llena de callejones, casas de amplios patios y corredores, construcciones sostenidas por columnas de cantera y calles adoquinadas. Por su antigüedad, resultan atractivos a los visitantes. La Plaza de la Constitución con su quiosco, las plazuelas Benito Juárez, Miguel Hidalgo y José María Sánchez, los lavaderos públicos, el edificio de la presidencia municipal y sus dos acueductos, conocidos como los Arcos.

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Aculco fue fundado alrededor del año 1110 de nuestra era por el pueblo otomí; y fue conquistado por los mexicas en el siglo xiv. Su nombre significa “lugar donde tuerce el agua”. Históricamente fue escenario de la batalla en la que los insurgentes encabezados por Miguel Hidalgo fueron derrotados por primera vez por las tropas de Félix María Calleja en 1810. El 19 de febrero de 1825 se constituyó como municipio, considerándose uno de los más antiguos del país.

Lo típicoAculco es rico en minas de cantera que han sido explotadas desde los tiempos prehispánicos y durante el virreinato brindaron el material para las construcciones.
En la actualidad, cuenta con varios escultores y artesanos que trabajan la piedra; tú puedes encontrar talleres donde se realizan barandales, fuentes y adoquines para embellecer plazas, parques y calles, o donde se elaboran piezas de ornato como esculturas y cruces atriales. Además de esta variedad de objetos, no dejes de conocer la gran actividad textil del lugar que te ofrece diversos y coloridos bordados de manta, tejidos elaborados con lana o quesquémetls, cobijas, sarapes y chales. Con el ixtle, fibra que se extrae del maguey, se elaboran ayates, redes rudimentarias para la pesca y la cosecha del maíz, sombreros de palma, morrales y prendas de vestir, como lo hacían los antiguos indígenas.