Buscan que Aquismón sea declarado «Pueblo Mágico»

A propuesta del diputado Fernando Chávez Méndez, el pleno de la LXI Legislatura  aprobó por unanimidad un punto de acuerdo para exhortar al Ejecutivo del Estado para que en el Presupuesto de Egresos Ejercicio Fiscal 2018 se asignen recursos a favor del municipio de Aquismón, a fin de que puedan realizarse las acciones necesarias que conlleven a lograr la declaratoria de “Pueblo Mágico” que es competencia emitir de la Secretaría de Turismo del Gobierno Federal.

Esto con el propósito de cumplir con los requisitos a que alude en el punto séptimo, fracción III del Acuerdo vigente que se establece los Lineamientos Generales para la Incorporación y Permanencia al Programa Pueblos Mágicos.

Además, para exhortar al titular de la Secretaría de Turismo Estatal para que de manera coordinada con el ayuntamiento de Aquismón se realice la gestión necesaria ante la Secretaría de Turismo Federal, para lograr la declaratoria de Pueblo Mágico.

También para exhortar al titular de la Secretaría de Turismo del Gobierno Federal, a fin de que previos los trámites y requisitos a que legalmente deba sujetarse, se confiera al municipio de Aquismón, la declaratoria de Pueblo Mágico.

Lo anterior tiene el objetivo de detonar el impulso turístico y económico, además de dotar de una mejor calidad de vida a los  habitantes del municipio de Aquismón.

En el punto de acuerdo aprobado se señala que es innegable que Aquismón tiene consigo las características necesarias para que pueda ser declarado Pueblo Mágico.

Para tal fin describió sólo algunos de sus atractivos: El Sótano de las Golondrinas que toma su nombre de los vencejos, pequeñas avecillas que habitan en las paredes de esta cima de 60 metros de diámetro y más de 500 de profundidad; por lo que la manifestación de la naturaleza traducida en bullicio hechizante sólo se puede vivir en ésta, catalogada como una de las maravillas de la huasteca potosina.

El Sótano de Las Huahuas que es un impresionante agujero creado en la tierra como resultado del colapso de suelo calcáreo, mide aproximadamente 480 metros de profundidad, con un diámetro de 60 metros y en éste habitan principalmente vencejos de pecho blanco, y el perico verde quien recibe su nombre étnico llamado Huahuas, de ahí el nombre de este sótano. La experiencia comienza con la salida de cientos de aves, siendo posible y en vía de excursión bajar a la cueva para observarla desde adentro. El estrecho sendero que se toma para llegar allá desde San Isidro Tampaxal, nos reserva el colorido de su flora.

En Aquismón, las Cuevas de Mantetzulel es otro de los sorprendentes atractivos. Pero si refrescarse es la idea, nada como el Nacimiento de Tambaque, cómodamente acondicionado con corredores elaborados en piedra, asadores, escalinatas y pequeñas represas, sombreadas por frondosos árboles de la región. El agua surge metros arriba, allá en las cascadas, en un sitio fresco y húmedo.

La cascada de Tamul es el máximo referente de atractivo natural, con su caída de hasta 300 metros de ancho y una altura de 105, salpicado por la aventura de remar de frente al “Tampaón”, un río que se forma precisamente ahí: en la insólita unión de las corrientes de los ríos “Gallinas” y “Santa María”.

En su trayecto encontraremos pequeñas cascadas que parecen salir de la nada, a través de la serranía, pero que en realidad nos anticipan la presencia de otro de los sitios dignos de visitar: la Cueva del Agua, un cenote de enorme profundidad pero de límpidas aguas, cuya frescura bien se antoja al regreso de la calurosa expedición.