La práctica del bullying entre los niños va, desgraciadamente, en aumento en todo el mundo. Casos de persecución y agresiones se están detectando en las escuelas, colegios, institutos o en las mismas familias que están llevando a muchos menores a vivir situaciones verdaderamente aterradoras.
Un caso más que se registra de esta práctica ocurrió en Argentina, donde una niña de 12 años decidió tomar una medida drástica para acabar con el tormento que vivía cada día. Para poner fin al miedo tomó veneno para ratas con intención de quitarse la vida en el colegio primario del Gran Mendoza.
Aunque la niña tomó un producto sumamente nocivo para la salud, afortunadamente resultó fuera de peligro y se mantiene en observación en el hospital. Sus familiares contaron que desde hace un tiempo la menor era acosada por dos compañeros, otra niña y un niño que, según comentaron otras mamás del colegio, son muy violentos y han llegado incluso a insultarla o golpearla.
Aunque este caso de bullying pudo terminar con la vida de una niña, las autoridades de la escuela aseguraron que no tenían idea de lo que pasaba, a pesar de ser las responsables de velar por la seguridad de sus alumnos.
«Nos tomó por sorpresa, no había denuncia previa en el colegio sobre esta situación de supuesto bullying», aseguró a Clarín Miguel Conocente, responsable de la Dirección de Orientación y Apoyo Interdisciplinario a las Trayectorias Escolares, de la DGE.
Miguel Conocente aseguró que lo habitual es que el equipo de terapeutas intervenga cuando en una escuela se dan situaciones de acoso entre compañeros, pero en este caso «no ha habido indicadores ni registros previos en la escuela, por lo que vamos a abocarnos a analizar el caso y ver si no hay otras problemáticas familiares detrás».
El diario Clarín destaca que la Dirección de Orientación y Apoyo Interdisciplinario cuenta con un equipo de 295 profesionales de salud dedicados a resolver este tipo de situaciones extremas, sin embargo este año tuvieron 25 casos de mayor gravedad de acoso escolar.