IMSS hace frente a cáncer de mama y cérvico uterino

Con el objetivo de disminuir las muertes por cáncer de mama y cérvico uterino, las unidades médicas familiares del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) realizaron en 2016 al menos tres millones de pruebas de Papanicolau y un millón 300 mil mastografías.

En un comunicado, el organismo informó que la meta para 2017 es incrementar el número de pruebas de detección oportuna, dado que a través de esos estudios es posible identificar el cáncer en etapas tempranas y que el tratamiento sea más efectivo.

La titular de la División de Prevención y Detección de Enfermedades del IMSS, Ivonne Mejía Rodríguez, refirió que la herencia, en caso de que la madre o hermana tengan esa neoplasia; presentar una enfermedad mamaria previa; iniciar la menstruación antes de los 12 años o primer embarazo antes de los 30, son los principales factores de riesgo para desarrollar cáncer de mama.

Subrayó que para detectar esta enfermedad, además de la mastografía que se realiza en mujeres de 40 a 69 años de edad, en el IMSS existen otras medidas como la exploración clínica realizada por personal de salud y la autoexploración.

En los módulos PrevenIMSS de las Unidades de Medicina Familiar, personal de enfermería realiza la exploración clínica de mama a mujeres desde los 25 años.

La especialista recordó que en 2016 hicieron más de 5.5 millones de exploraciones, a fin de detectar lesiones que pueden ser palpables, zonas dolorosas, abultamientos o algún otro signo que oriente a pensar en alguna anormalidad en las mamas para diagnosticarla y tratarla a tiempo.

Debido a que el cáncer de mama en un inicio no produce molestias, es importante que las mujeres, a partir de los 20 años de edad, se realicen la autoexploración cada mes y en un día fijo, a fin de conocer lo que es normal en su cuerpo, expuso.

En caso de identificar anormalidades en sus mamas, como hundimientos, inflamación, enrojecimiento o ulceraciones en la piel, desviación de la dirección o retracción del pezón, es vita acudir con el médico.

Para el caso del cáncer cérvico uterino, precisó que hasta 99 por ciento de los casos se debe a de la infección persistente del Virus del Papiloma Humano (VPH), sin embargo, no debe ser causa de alarma, pues en la mayoría de los casos sólo se requiere de vigilancia.

Hizo ver la importancia de llevar un estilo de vida saludable, como practicar ejercicio regularmente, mantener un peso adecuado, no fumar, ya que de lo contrario la obesidad y el tabaquismo se convierten en factores de riesgo para desarrollar este cáncer.

Este padecimiento, al igual que el cáncer de mama, apuntó Mejía Rodríguez, no presenta síntomas de inicio, pero es posible identificar lesiones precancerosas o el cáncer en etapa temprana a través del Papanicolaou.

Por ello, todas las mujeres deben acudir a realizarse la prueba si tienen de 25 a 64 años y hacer conciencia de su salud, concluyó.