El vocero del arzobispado de San Luis Potosí, Juan Jesús Priego Rivera consideró que los hechos de violencia que se han suscitado en la entidad en los últimos días son desafío que están lanzando las organizaciones delictivas a las fuerzas de seguridad, mismo que debe atenderse.
Dijo que es momento que las autoridades necesitan trabajar de manera coordinada para fortalecerse y hacele frente a estos problemas que han robado la tranquilidad de los potosinos.Apuntó que se requiere un ataque frontal ya que de continuar con estos hechos, San Luis Potosí podría llegar a compararse con Ciudad Juárez, situación que podría afectar en la imagen y economía, por lo que pide a las autoridades «no dormirse en sus laureles».
Pidió a los tres ordenes de gobierno hacerle frente a la delincuencia, puesto que este San Luis violento no es la ciudad que los potosinos quieren.