De acuerdo con Osvaldo Santín, jefe del Servicio de Administración Tributaria (SAT), la autoridad fiscal ha identificado, a través de auditorías, a más de dos mil 600 empresas fantasma.
El jefe del órgano recaudador explicó que se tienen a más de cinco mil empresas publicadas en la página de Internet del SAT, las cuales se encuentran como presuntas empresas fachadas; de éste número, más de dos mil 600 ya están determinadas como empresas fantasma definitivas.
Asimismo, informó que a estas empresas están vinculadas otras 80 mil que presuntamente aprovecharon las facturas que adquirieron de las empresas fachadas.
“El monto facturado por estas dos mil 600 empresas rebasa los 400 mil millones de pesos. Derivado de las publicaciones que ha hecho el SAT, que al día de hoy son 43, se han logrado recuperar más de ocho mil 400 millones de pesos derivado de la autocorrección que las mismas empresas han llevado a cabo en virtud de dejar sin efecto las facturas que adquirieron de estas empresas fantasmas”, explicó Osvaldo Santín.
Con respecto al tema de los Panama Papers y los Bahama Leaks, el jefe del SAT precisó que se sigue avanzando en auditorías; sin embargo, no tienen una fecha para presentar algún informe actualizado de los resultados de éstas.
“Se trata de auditorías de naturaleza internacional, cuyo plazo puede llegar hasta dos años y, por lo tanto, estamos en una etapa donde esperamos información de otras jurisdicciones. En la medida que tengamos información relevante y que se realicen cambios importantes en el estatus en que se encuentran los casos, estaremos elaborando un nuevo reporte”, aseveró.
En abril del año pasado, el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por su sigla en inglés) filtró 11.2 millones de documentos en donde se reveló cómo desde el bufete panameño de abogados Mossack Fonseca se crearon sociedades fantasma para diferentes personalidades alrededor del mundo.
Dichas prácticas habrían servido para la evasión fiscal o para esconder dinero procedente de actividades ilícitas.
Con la revelación de estos documentos, Aristóteles Núñez, quien fuera en aquel entonces jefe del SAT, indicó que la investigación del fisco podría tardar hasta dos años y que la ley no distinguiría si son funcionarios “de bajo peso o alto rango, pequeños o grandes empresarios. La ley se aplica y es general para todos”.
Silvia Matus, presidenta de la Comisión de Prevención de Lavado de Dinero Financiamiento al Terrorismo y Anticorrupción del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, precisó que los Panama Papers son un tema de evasión fiscal, donde las personas involucradas quieren mover grandes sumas de dinero y no pagar los impuestos correspondientes.
“Esta evasión fiscal se descubrió que estaba concentrada en el despacho que les hacía una serie de estrategias fiscales para evadir impuestos (…) dicho dinero, al no pagar impuestos, es un recurso que probablemente sea de procedencia ilícita y al ser un recurso ilícito puede ser precedente de lavado de dinero”, indicó.
De acuerdo con el ICIJ, existen 68 empresas offshore ubicadas con dirección en México, de las cuales 39 están con jurisdicción de Panamá; 14 en las Islas Vírgenes Británicas; seis en Seychelles y tres en las Bahamas, mientras que en el Reino Unido, Hong Kong y en el estado de Nevada se ubicaron otras tres.
Cinco meses después de la revelación de los Panama Papers, el ICIJ publicó los Bahama Leaks, que constan de 1.3 millones de archivos que revelaron a más de 400 mexicanos relacionados con empresas fantasma creadas en las Bahamas. Al igual que con los Panama Papers, el SAT empezó las auditorías correspondientes.
Por otro lado, Osvaldo Santín indicó que en lo que respecta a la repatriación de capitales, en términos de lavado de dinero, están revisando e identificando a las personas que regresan su dinero para que, en caso de que haya algún indicio de que provenga de alguna actividad ilícita, se reporte a la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para que se llevan a cabo las investigaciones correspondientes. Agregó que por el momento no se ha encontrado ningún indicio.