La Enfermedad Vascular Cerebral (EVC) es una alteración neurológica que se caracteriza por su aparición brusca, generalmente sin aviso, con síntomas de 24 horas o más, causando secuelas y muerte. El diputado Jesús Antonio López Rodríguez (PAN), secretario de la Comisión de Salud, señaló en febrero pasado que anualmente ocurren más de 130 mil muertes en México por enfermedad vascular o infarto cerebral, la tercera causa de muerte en el país.
Un ataque cerebral o derrame cerebral ocurre cuando se altera el ujo de sangre hacia el cerebro. Cuando se presenta un ataque, un área del cerebro empieza a morir porque deja de recibir el oxígeno y los nutrientes que necesita para funcionar. Para evitar cualquier problema es importante llevar una alimentación sana. Se recomienda consumir abundantes frutas y verduras, cereales integrales, carnes magras, pescado y legumbres, además de poca sal y azúcar. Así que te daremos una lista de los siete alimentos que te ayudarán a reducir las probabilidades de sur un infarto cerebral: 1. Las zanahorias: Según un estudio realizado en 2008 en la Universidad de Harvard (Estados Unidos) comer unas cinco zanahorias a la semana podría reducir el riesgo de ictus (lesión en el cerebro ocasionada por la interrupción de la irrigación sanguínea) en un 50 %. Dado que son ricas en antioxidantes, evitan que se nos formen cóagulos en las arterias y favorecen la circulación sanguínea.
2. Aguacate: Basta con consumir medio aguacate al día. Es rico en esos ácidos grasos tan beneficiosos para nuestro cerebro como el omega 3, el cual previene la oxidación celular y su envejecimiento prematuro.
3. Los tomates: El tomate es un cóctel natural de antioxidantes, gracias a su capacidad para reducir la tensión arterial y favorecer la circulación sanguínea. Todo se debe a una sustancia llamada homocisteína, que se relaciona con una menor probabilidad de sufrir un infarto cerebral.
4. Sardinas en aceite de oliva: Las sardinas son ideales si las consumes entre una y dos veces por semana. Son un tesoro natural de grasas saludables, de calcio y vitamina D. Son protectoras naturales de nuestro cerebro, aunque hay un dato que debes conocer: si las abres y no te las terminas, no las debes guardes nunca en su lata original. Resérvalas en un recipiente de cristal o cualquier otro soporte que no sea de metal.
5. Melones y sandías: Ambas frutas son ricas en agua, en minerales, antioxidantes y son, además, muy bajas en sodio, perfectas para reducir nuestro colesterol y evitar así el problema de la arteriosclerosis.
6. Té verde: Es un recurso natural rico en antioxidantes, en polifenoles, en compuestos esenciales para reducir el colesterol y luchar contra el envejecimiento cognitivo. Para beneficiarte más recuerda consumirlo 20 minutos después de tus comidas.
7. Avena: Tomada en el desayuno, nos va ayudar a reducir el nivel de azúcar en la sangre y a mantener a raya los niveles de colesterol malo. También es adecuada para reducir el estrés y nos aporta increíbles nutrientes para nuestra salud cerebral, como el zinc o el hierro