Rafael Nadal reconoció que volver a ser el número uno del mundo es “algo especial” por todo lo que le ha tocado recorrer hasta alcanzarlo de nuevo.
Como gran favorito en el Masters 1000 de Cincinnati ante la baja por lesión del suizo Roger Federer, Nadal, quien comenzará hoy su andadura en el torneo contra el francés Richard Gasquet, en segunda ronda, dijo que atrás había quedado el fantasma de las lesiones, derrotas frustrantes y dudas acerca de poder lograr la meta que ahora ya tiene asegurada a partir del lunes: estar en la cima de la ATP.
Nadal, que volverá a ser número uno de la ATP por primera vez desde el 6 de junio del 2014, reconoció ante los periodistas que sentía la baja de Federer porque era una mala noticia para el tenis y el torneo.
Para mí volver a ser el número uno del mundo es algo especial dado que desde la última vez que estuve al frente de la clasificación han sucedido muchas cosas”, explicó Nadal. “Lesiones, momentos muy difíciles, pero también he mantenido la pasión y el amor por el deporte y eso ha sido lo que me ha permitido la oportunidad de estar de nuevo arriba”.
El español dijo que ahora trataba de seguir disfrutando al máximo del tenis y el momento por el que atraviesa, pero sobre todo de estar listo para competir al máximo nivel en el torneo de Cincinnati después de la eliminación sorpresa que sufrió en el Masters 1000 de Montreal.
Lo más importante en este momento es volver a encontrar mi mejor juego y hacer un gran torneo”, destacó el español, quien insistió que después de lo vivido en 2016, la temporada del 2017 ha sido de ensueño.
Nadal ha conseguido cuatro títulos en lo que va de 2017, incluido el décimo en el torneo de Barcelona, Mónaco y Roland Garros, además de llegar a otras tres finales, para ser el líder de la ATP con siete.
La realidad muestra que estoy teniendo una gran temporada, pero todavía quedan muchos torneos en los que quiero competir al máximo”.