- Entre ellas se encuentran, la mariguana, el crack, alucinógenos, inhalables, metanfetaminas, anfetaminas y tranquilizantes
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes 2014, en nuestro país, el 16 por ciento de los estudiantes de secundaria y bachillerato ha consumido drogas alguna vez en su vida; entre las que se encuentran, la mariguana, el crack, alucinógenos, inhalables, metanfetaminas, anfetaminas y tranquilizantes; mientras que, el consumo de cocaína y heroína está por debajo del porcentaje nacional.
Los estudiantes que requieren apoyo o tratamiento debido a su consumo de drogas corresponden al 7 por ciento; de los cuales 5.4 por ciento son alumnos de secundaria y el 9.9 por ciento de bachillerato.
Ante éste panorama, es indispensable que la familia, la escuela y la comunidad realicen acciones preventivas que fomenten la reducción del consumo de sustancias, y en el caso de la Secretaría de Salud, los programas de prevención, se apoyan en los resultados de las investigaciones epidemiológicas y en la causa del comportamiento las cuales muestran “factores de riesgo” que tienen mayor ponderación para predecir un problema de consumo de drogas, a diferencia de los factores que ayudan a disminuirlos denominados “factores de protección”.
Recordemos que la prevención de adicciones comienza en el hogar, de acuerdo a la campaña nacional de información para la prevención de adicciones las siguientes recomendaciones para padres y madres de familia son fundamentales para evitar el consumo de alcohol y de cualquier otra droga.
En el estado , la Secretaría de Salud cuenta con siete centros de Atención Primaria en Adicciones (CAPAS), en San Luis, Soledad, Matehuala, Salinas, Rioverde, Cd. Valles y Tamazunchale, son parte de una extensa Red de Unidades Médicas Especializadas en la prevención y atención de las Adicciones, donde se aplica un modelo de prevención y de atención basado en la evidencia.
El objetivo de los CAPAS es ofrecer a la comunidad un modelo de intervención temprana de las adicciones, que contempla desde la prevención del consumo de sustancias psicoactivas y la promoción de la salud mental hasta el tratamiento breve de corte cognitivo conductual de forma ambulatoria, a través de personal de psicología y trabajo social. Las acciones preventivas se realizan con toda la población, a través de diferentes actividades como: talleres del programa para padres con hijos adolescentes en riesgo como: crianza positiva, habilidades para la vida, mientras que en prevención selectiva: sesiones de consejo breve, pláticas para alumnos y maestros, orientación a familiares de usuarios, orientación a familiares y detección y evaluación de riesgo a través del tamizaje.