Ai Weiwei presenta retratos en Lego de activistas

El artista chino Ai Weiwei presentó hoy en el Museo Hirshhorn de Washington su instalación «Trace» (Rastrear) sobre disidentes y activistas de derechos humanos, con retratos realizados con piezas de Lego entre los que figuran Edward Snowden y Chelsea Manning.

Esta obra habla de la libertad de expresión. Esta gente pagó su amor a la libertad con su propia libertad», indicó Ai en una breve entrevista con NPR, la radio pública de EU.

Ai explicó que comenzó a realizar estos retratos «tomando prestados» piezas de Lego de su hijo.

«Desafortunadamente, hay muchos prisioneros políticos en el mundo», subrayó.

La exposición, compuesta por 1.2 millones de piezas, reúne retratos de 176 de disidentes de todo el mundo hechos con los populares juguetes de la marca danesa Lego, y además de Snowden o Manning, también incluyen a Martin Luther King Jr., Nelson Mandela y la premio Nobel de la Paz birmana Aung San Suu Kyi.

Aunque la muestra ya se exhibió en San Francisco en 2014, es la primera vez en la que Ai, que actualmente reside en Berlín, ha podido viajar a EU para asistir a la exposición después de recuperar su pasaporte en 2015 tras cuatro años sin él.

Se puede hacer la vinculación directa entre esta obra y su propia detención en China e incapacidad para salir del país. Así que aquí está, un artista que ha sido franco sobre una serie de temas que han sido muy sensibles en China y después fue detenido», remarcó Melissa Chiu, directora del museo en un comunicado.

En este sentido, Chiu afirmó que «durante su distinguida carrera, ha redefinido el papel tanto de artista como el de activista».

Ai, de 58 años, fue detenido durante 81 días por «incitar a la subversión contra el Estado» en 2011 por las autoridades chinas y pasó un año en arresto domiciliario hasta que en junio de 2012 se le permitió salir de casa, aunque no del país por estar investigado por bigamia, pornografía e intercambio ilícito de divisas extranjeras.

La exposición estará abierta al público en el Museo Hirshhorn, en la capital estadounidense, hasta enero de 2018.