Combate a la desertificación y sequía, reto de la humanidad

CIUDAD DE MÉXICO

Para detener y revertir la degradación de la tierra es necesario regresar a técnicas tradicionales de agricultura, evitar fertilizantes químicos y dejar descansar al suelo entre siembras, recomendó el titular del Laboratorio de Suelos del Colegio de Geografía de la UNAM, Luis Luna, en el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía.

El 17 de junio de 1994, nació la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación, cuyos 194 países miembros conmemoran este día para recordar que la biodiversidad y la alimentación de miles de millones de personas depende de la calidad de los suelos; la necesidad de frenar su devastación y generar resiliencia.

El catedrático comentó que 75 por ciento del suelo mexicano se cataloga en: frágil (potencialmente en riesgo de perderse) y árido o semiárido, lo que implica que la mitad del territorio presenta sequía en diferente grado.

Mencionó que 450 municipios de 19 estados sufren por ese fenómeno, y los más afectados son Oaxaca, Sonora, Chihuahua y Zacatecas.

De 1950 a la fecha, el fenómeno de la desertificación crece 30 a 35 veces más rápido respecto a siglos anteriores, y lo que hoy se tiene es pérdida de suelos agrícolas por la desertificación, la cual ocurre por la degradación del suelo y la falta de agua.

La desertificación es el proceso de crecimiento de las zonas áridas y semiáridas por efecto de la actividad humana; mientras que el fenómeno de desertización es el crecimiento, avance y movimiento natural de los desiertos, explicó.

El especialista indicó que entre los factores que inciden en la desertificación están la pobreza, la deforestación, las prácticas agrícolas inadecuadas y el sobrepastoreo (uso excesivo del suelo para ganadería).

Subrayó que, de acuerdo con la ONU, mil millones de personas se localizan en zonas de riesgo, áreas que están en proceso de transición, con suelos con algún grado de erosión, y el común denominador de estas comunidades es que son pobres y padecen falta de alimento.