Inundaciones en Guadalajara se disparan desde el 2000

El coordinador de la Licenciatura en Geografía del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), Luis Valdivia Ornelas, indicó que a partir del año 2000 se han disparado las inundaciones de manera considerable en el área metropolitana de Guadalajara.

Agregó que esta información fue obtenida a raíz de un estudio donde se tienen registrados 100 años de observaciones de los eventos peligrosos vinculados con las inundaciones en la zona metropolitana.

Explicó que hay poco más de 350 polígonos, «donde el tema de inundaciones se está convirtiendo en un problema severo, y esto ha crecido en función de que ha aumentado la mancha urbana y se han transformado las condiciones reales del valle».

El impacto urbano ha propiciado que los causes se hayan convertido en colectores con menos capacidad, o en algunos casos, las calles los han sustituido y la urbanización ha impactado en la disminución de la infiltración, además de que el incremento muy alto de la escorrentía, ha aumentado la velocidad.

Por ello, el especialista mencionó que estos elementos han hecho que se disparen las inundaciones, sobre todo a partir del año 2000; desde entonces se han disparado las inundaciones de manera considerable en el área metropolitana, «porque antes teníamos más o menos 70, 80 o 90 sitios, pero a partir de 2000 se multiplicaron las zonas de inundación, en la actualidad tenemos alrededor de 350 polígonos de inundación».

Manifestó que «hemos documentado en 100 años casi cinco mil eventos de inundación, y de estos, 70 por ciento son de los últimos 17 años».

Comentó que las situaciones que provocan las inundaciones son muy diversas ya que por ejemplo, la infraestructura hidráulica para tratar de detener el agua que escurría de la periferia a esta ciudad, en Santa Catalina, dejó de funcionar, aunque últimamente lo han tratado de activar.

Por otra parte, Valdivia Ornelas explicó que el canal del sur que bordea desde avenida R. Michel hasta casi la avenida Federalismo, no tiene la capacidad de detener toda esa cantidad de agua derivada de las precipitaciones.

Asimismo, detalló que en los últimos meses existen diversos problemas en varias zonas, como por ejemplo el hecho de que vasos reguladores naturales se han rellenado, a lo que aseveró, es un tema delicado.

«Por ejemplo, en la colonia el Órgano o en La Duraznera hemos visto que en los últimos años no sé porque se autorizó rellenar ese vaso que funcionaba como regulador de toda el agua que viene del Tapatío, lo cual expone a esta colonias a verse mayormente afectada por las inundaciones», aseveró.

Por otro lado, en Toluquilla, Tlaquepaque, con las urbanizaciones que se dieron en las colonias Lomas del Sur y Unión del Cuatro, desaparecieron buena parte de los vasos reguladores de las zonas inundables naturales. Lo que ha propiciado un problema serio porque hay mucha población asentada en los márgenes de los canales.

El canal de Las Pintas, que traía agua a Guadalajara, se convirtió en un canal que regula las tormentas «cuando no tiene esa función, está el sistema completamente saturado y el problema es que sigue la urbanización.

Valdivia Ornelas subrayó también que existe un problema de planeación, ya que «desafortunadamente las soluciones sólo se enmarcan en crear infraestructura hidráulica, cuando no son las soluciones adecuadas sino que se tiene que ir acompañado de un proceso de control del crecimiento urbano».

En los últimos 15 años, no se creó más infraestructura hidráulica necesaria, «ya que se justificaba que las inundaciones estaban asociadas a la basura en las bocas de tormenta, lo cual es básicamente un problema que agrava las inundaciones pero no lo que las origina.

Acciones contra inundaciones

Destacó que en Guadalajara llueve mucho, situación que ante las tormentas muy severas, cualquier tubo, colector o canal es insuficiente para poder conducir el agua que se genera en periodos de media o una hora.

Ante ello, propuso la ampliación de los sistemas de colectores y la creación de tanques de tormenta acompañados de una política de más captación y retención del agua a través de espacios verdes.

El coordinador de la Licenciatura en Geografía del CUCSH, puntualizó que hay muchas acciones que pueden realizarse a través de los sistemas urbanos de drenaje sostenible.

No obstante, dijo que han habido acciones muy puntuales «en un marco exclusivamente de crear infraestructura en busca de solucionar el problema, pero desde los años 20, vimos que no eran la solución completa ante las inundaciones».

Citó como ejemplo el hecho de que siempre se pensó que el colector San Juan de Dios iba a ayudar a desahogar el agua de lluvia, y sobre todo el agua urbana, pero posteriormente se detectó que fue rebasado completamente por la urbanización en Guadalajara.

Sin embargo, afirmó que en zona metropolitana de Guadalajara el problema «ya es crónico, pero el patrón de comportamiento de urbanización sigue siendo igual, se siguen los mismas pasos, por ejemplo, en las zonas de Tesistán, Zapopan, de Toluquilla, Tlaquepaque o del municipio de Tonalá, por lo que es un problema que no se va a resolver».

Manifestó que siempre hay acciones «como para paliar el problema, porque no se ha entendido que es un problema de control del crecimiento urbano y de la falta de una política de urbanización de carácter integral».

Por lo cual puntualizó que las inundaciones se han convertido «en un problema muy severo, porque antes se pensaba que estaba vinculado con que llovía, pero no, las inundaciones están vinculadas con la falta de control del crecimiento urbano y por lo tanto se necesita una política metropolitana».