La cantante pop estadounidense Ariana Grande suspendió este miércoles su gira hasta principios de junio, tras el fatal atentado en Mánchester durante uno de sus conciertos hace dos días.
«Debido a los trágicos eventos en Mánchester, la gira ‘Dangerous Woman’ con Ariana Grande ha sido suspendida hasta que podamos evaluar mejor la situación y rendir nuestro homenaje a los fallecidos», indicó un comunicado de sus agentes.
La cantante de 23 años, que viajó de vuelta a Estados Unidos, canceló los shows de este jueves y viernes en el 02 Arena de Londres, así como los previstos en Bélgica, Alemania, Polonia y Suiza hasta el 5 de junio.
Su próxima actuación sería en principio el 7 de junio en París.
Un kamikaze hizo estallar una bomba poco después de que la cantante abandonara el escenario del Mánchester Arena, uno de los más grandes de Europa, con capacidad para 21 mil espectadores.
El ataque, en el que 22 personas murieron y 59 resultaron heridas, fue posteriormente reivindicado por el grupo Estado Islámico.
«Pedimos en este momento que continuemos apoyando a la ciudad de Mánchester y todas las familias afectadas por este acto de violencia cobarde y sin sentido», añadió el comunicado.
«Nuestra forma de vida fue nuevamente amenazada pero lo superaremos juntos».
Grande, entre cuyos seguidores abundan los adolescentes, bautizó su último disco como «Dangerous Woman» (mujer peligrosa), aunque raramente su música despierta controversia.
Su único comentario sobre el incidente fue un corto mensaje en redes sociales diciendo que estaba «destrozada» por el ataque.
El diario británico Daily Mail publicó fotos de una decaída Grande desembarcando un jet privado en su natal Boca Raton (Florida), donde fue recibida por su novio, el rapero Mac Miller.
Sus mánagers declinaron comentar sobre el lugar donde se encontraba la intérprete, aunque datos públicos de aviación mostraron que un avión procedente de Birmingham (Inglaterra) había aterrizado en Boca Raton después de una corta escala en Wilmington, Carolina del Norte.