Increíble hallazgo de un joven dentro de un agujero

Izaak Eglington-Watts (19) y su amiga Emily Thompson paseaban por el bosque Plymbridge al interior de una reserva natural ubicada en Plymouth, en el sur de Gran Bretaña, cuando se encontraron con una construcción de ladrillos, en cuyo interior había un agujero.

Sin pensarlo dos veces, Izaak se acercó al orificio para gritar dentro de él y escuchar el eco de su voz.

«¡Hola!», dijo fuerte hacia el interior del agujero, esperando oír cómo el sonido de su voz se repetía una y otra vez.

Sin embargo, el joven se llevó una gran sorpresa: alguien le respondió.

Estaba absolutamente aterrorizado

Asombrado -y asustado-, Izaak corrió hacia donde estaba su amiga Emily para contarle lo sucedido.

«Estaba absolutamente aterrorizado (…) No me esperaba una respuesta», relató el joven a The Plymouth Herald, y agregó: «Fue solo por curiosidad que me acerqué; nunca pensé que habría algo en su interior».

Ese «algo» era James Thompson, de 51 años, que desde hacía alrededor de un mes se encontraba desaparecido.

Según explicó la policía local, el hombre había estado viviendo en el bosque, pero tras sufrir una herida en un tobillo, entró en el agujero para refugiarse.
Si hubieran pasado un par de días, quizás no habría sobrevivido

Thompson comenzó a perder fuerzas de a poco y cuando Izaak lo halló, estaba muy débil.
«Estaba tan delgado y deshidratado que si hubieran pasado un par de días, quizás no habría sobrevivido», aseguró un portavoz de la Policía.

Se destacó y mencionó tambien que «Su familia debe estar en la Luna (…) Incluso si es que él no quería ser encontrado, ahora está bien y a salvo», sostuvo Izaak, quien sin querer terminó convirtiéndose en un héroe local.