Miles salen a marchar en una ciudad de Caracas ‘blindada’

Varios miles de opositores, vestidos con camisetas blancas y levantando banderas venezolanas, salieron este sábado a marchar por varias vías del este y oeste de la capital en una nueva jornada de protestas contra el gobierno.
Los opositores salieron a marchar en medio de una fuerte presencia en las calles de cientos de policías y guardias nacionales que bloquearon la mayoría de los accesos al centro de la capital.
La oposición había anunciado que retomaría este sábado las movilizaciones en todo el país contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro en medio de un creciente clima de tensión y pedidos de países vecinos de acciones urgentes para contener la situación de violencia en Venezuela.
La coalición opositora convocó a una «marcha del silencio» en Caracas y otras ciudades del interior para protestar contra la «represión» de los cuerpos de seguridad y la veintena de muertos que han dejado las manifestaciones de las últimas tres semanas.
Los opositores esperan marchar desde 20 puntos de la capital hacia la sede de la Conferencia Episcopal Venezolana, en el oeste de la ciudad. Decenas de policías y guardias nacionales tomaron desde el amanecer varias vías del centro y oeste de la capital y la sede de la Defensoría del Pueblo. Asimismo, las autoridades cerraron once estaciones del metro capitalino por medidas de seguridad.
Las protestas de las últimas tres semanas han dejado 20 fallecidos, más de un centenar de heridos y detenidos.
Andrés Ramírez, un ingeniero agrónomo de 34 años, salió a marchar levantando una cruz de casi dos metros de alto envuelta en una bandera venezolana.
«Estoy aquí cargando está cruz por la paz de todos los venezolanos y por aquellos compañeros y amigos que han caído en estos 18 años», afirmó Ramírez mientras caminaba con la cruz bajo un intenso sol.
«Le pedimos a Dios que nos cuide en estos momentos de crisis y sufrimiento que estamos llevando en Venezuela», agregó. Había manifestantes de todas las edades.
«Lo último que me queda de vida lo daré por liberar a Venezuela de esta dictadura», expresó Emma Gonzalez, una jubilada de 76 años, casi a punto de estallar en llantos.
Al rechazar la acción de los cuerpos de seguridad durante las protestas, González dijo que «nosotros estamos decididos a aguantar todo porque queremos que se vaya Maduro. La única manera que tenemos para sacarlo es protestando en las calles porque no tenemos armas y no nos dejan votar».
¿Qué piden para cesar las marchas en Venezuela?
El presidente de la Asamblea Nacional, diputado Julio Borges, ratificó las noche del viernes que la oposición mantendrá las acciones de calle hasta que el gobierno acceda a permitir la realización de elecciones, se abra un canal humanitario para alimentos y medicinas, se liberen a los presos políticos, y se respete al Congreso.
«En Venezuela hoy no hay Constitución», afirmó Borges en una entrevista con CNN en Español al acusar a Maduro de dar un «golpe de estado» contra la Asamblea Nacional, que controla la oposición desde el 2016 luego de pasar 17 años en manos del oficialismo.
Ante las cámaras el dirigente opositor lanzó un reto a Maduro a que presente «un plan mejor que el voto» para salir de la crisis que enfrenta Venezuela, que está agobiada por una inflación que según estimaciones del Fondo Monetario Internacional podría alcanzar este año los cuatro dígitos; severos problemas de escasez de alimentos y medicinas, y una fuerte recesión económica.
Maduro se pasea por las calles
Maduro anunció la noche del viernes, en un video que difundió en su cuenta de Twitter, que promoverá un «movimiento de convivencia nacional» para enfrentar a los «fascistas» y «golpistas», y sentenció que «la paz se impondrá» en Venezuela.
En el vídeo se observa al mandatario conduciendo de noche un vehículo por unas calles de Caracas, y pasando frente a una pared que tiene escrito el grafiti «Maduro asesino de estudiantes».
Las tensiones políticas se intensificaron esta semana luego de las multitudinarias marchas que hizo la oposición entre el miércoles y el jueves en Caracas y otras ciudades del interior, y los saqueos de decenas de comercios que se registraron el jueves en el oeste de la capital donde perecieron once personas.
Durante la noche del viernes se reportaron nuevas protestas callejeras en zonas de clase media y baja del este de la capital.
La crisis venezolana y la muerte de manifestantes ha generado preocupación entre diversos países de la región, y organizaciones como la ONU y la OEA que urgieron a Caracas a tomar acciones para reducir la polarización y crear condiciones para enfrentar la situación.
Algunas organizaciones humanitarias y opositores han cuestionado la actuación de los cuerpos de seguridad a los que señalan de excederse en la contención de las protestas. Las autoridades han desestimado las críticas y sostienen que actúan apegados a las leyes.
La crisis política se intensificó a raíz de dos sentencias que emitió a finales de marzo el Tribunal Supremo de Justicia, que es señalado de estar controlado por el gobierno, contra la Asamblea Nacional. Aunque los dictámenes fueron revertidos a inicios de mes las protestas no han cesado.