El peligro de los cultivos que se están acabando el agua subterránea del planeta

Aunque la agricultura sea una actividad necesaria para tener alimentos a lo largo y ancho de la Tierra, la forma en la que se obtiene el agua para regarlos no siempre es la mejor y existen algunos tipos de cultivo que están terminándose las fuentes del vital líquido antes de que el mismo ciclo del planeta les permita rellenarse de forma natural.

Así como la cantidad de habitantes en el mundo va en aumento, también la demanda de alimentos crece, por lo tanto la presión sobre los recursos hidráulicos subterráneos, los cuales no son renovables y se utilizan principalmente para el riego de los cultivos de arroz, trigo y algodón.

De acuerdo con datos publicados por la BBC, cerca del 43 por ciento del agua que se emplea en los campos de cultivo alrededor del mundo proviene de acuíferos subterráneos y no de ríos o lagos; en la mayoría de estos casos, el agua de lluvia no alcanza para rellenarlos a la misma velocidad a la que se vacían.

Estados Unidos, México, Irán, Arabia Saudita y China están dentro de los 10 principales usuarios de agua no sustentable para la agricultura, pero al mismo tiempo están entre los 10 países que más importan alimentos producidos gracias al riego con agua subterránea.
Un ejemplo para entender mejor este punto es que Irán importa arroz de Pakistán, el cual es cosecha gracias al riego por acuíferos subterráneos que son explotados 50 veces más del límite que podría ser sustentable por la naturaleza, y al mismo tiempo exporta cosechas irrigadas de la misma forma, los cuales son explotados 20 veces más que el límite sostenible.

Esta situación puede provocar un aumento en los precios de los alimentos, debido a que la escasez de agua forzará a los productores a invertir más dinero para encontrar recursos hidráulicos necesarios para regar sus campos.
Por lo tanto, la escasez de agua provocada por el agotamiento de los recursos subterráneos no solo afectará a los países productores y exportadores, sino también a los que importan alimentos para cubrir con la demanda de sus pobladores.

Es decir, si no se toman medidas urgentes para utilizar el agua de forma más inteligente el agua subterránea, llegará el día en el que se agote y provocará que los suministros de alimentos corran peligro, lo cual sería una grave crisis a nivel mundial, según explica Corole Dalin, investigadora del University College de Londres en un estudio publicado por la revista especializada Nature.

Algunos países desarrollados como Estados Unidos y China están conscientes de esta situación y han puesto en práctica medidas como restringir el uso del agua en California cuando hay periodos largos de sequía, sin embargo la gran mayoría de las naciones aún no ponen en práctica ninguna acción similar para reducir el uso de aguas subterráneas.

Los investigadores a cargo del estudio aseguran que este no es sólo un problema de los gobiernos, que si bien sí deben implementar medidas para proteger sus recursos y su economía, no pueden cargar con la responsabilidad completa.

“Los productos que los consumidores compran en el supermercado pueden tener un impacto ambiental muy diferente según el origen del producto o en cómo fueron irrigados”, explicó a la BBC Yoshide Wada, miembro del Instituto Internacional para el Análisis de Sistemas aplicados.

Por eso es que él propone que los alimentos deberían tener una etiqueta que brinde información sobre el agua que se utilizó para su producción, cantidad y origen y al mismo tiempo, enseñarle a la gente el impacto que los distintos tipos de riego tienen para el planeta.