Turismo y atractivos en Vallarta

Puerto Vallarta es una ciudad y uno de los 125 municipios del estado de Jalisco, México.

En el 2005, el municipio contaba con una población estimada de 307,107 personas, así como cinco millones de turistas anuales. Junto con el municipio de Bahía de Banderas del estado de Nayarit, conforma la Zona Metropolitana de Puerto Vallarta siendo así la segunda más poblada de ambos estados. Asimismo el municipio es uno de los que registran mayor crecimiento poblaciónal en el estado, inclusive mayor que los municipios centrales.

Es la segunda zona económica más importante del estado de Jalisco y el tercer puerto más importante de México. Actualmente, es uno de los lugares más visitados del país. Su nombre está plasmado en varias canciones populares. Los restos arqueológicos más antiguos que se han encontrado en Puerto Vallarta, hasta la fecha, provienen del sitio llamado La Pedrera en la calle Costa Rica, en la colonia Lázaro Cárdenas. Es probable que los primeros asentamientos se hayan establecido alrededor del año 300 a. C. en el Preclásico Medio. Mil años después llegó la gente de Aztatlán en el Post Clásico Temprano y finalmente estuvo habitado por grupos de la cultura Banderas en el Post Clásico Tardío. Esta cultura fue la que encontraron los españoles cuando llegaron al valle.

1. Centr Histórico, El encantador centro de Puerto Vallarta se quedó suspendido en la historia conservando mucho de la aldea original. De entrada sus calles siguen siendo empedradas, y con regulaciones municipales en cuanto a anuncios de neón, los comercios se esconden muy bien entre esas blancas fachadas y tejas rojas. Cuando pases por ahí no olvides visitar su Plaza de Armas en donde tocará la banda los domingos en la noche y los adultos mayores saldrán a bailar.

2. El Malecón, Existiendo desde 1936 es uno de los destinos favoritos de los vallartenses y los turistas pues a lo largo de sus dos kilómetros podrás admirar la vista espectacular del Pacífico.

A lo largo de tu caminata también te encontrarás con sus famosas esculturas de bronce y arena, un teatro al aire libre, restaurantes, tiendas de artesanías, boutiques, bares y más. Sin duda es una visita obligada y una excelente forma de relajarse a un lado del mar.

3. Tourd de exploración, Si quieres aprovechar al máximo tu estadía en Puerto Vallarta, toma uno de los múltiples tours que son ideales por su belleza natural y riqueza en flora y fauna. Podrás escoger entre actividades acuáticas (como nado con delfines o buceo), actividades offroad (paseos en 4×4 o visitas al bosque tropical) o incluso descubrir algunas joyas escondidas como El Tuito. Cual sea tu preferencia encontrarás un tour que se ajuste a tus intereses.

4. Marina Vallarta, Si estás buscando una experiencia de primera durante tu visita a Puerto Vallarta, el lugar al que debes acudir es a Marina Vallarta en donde encontrarás un club de golf, suaves playas que llegan hasta el centro de la ciudad, centros comerciales, canchas de tenis y múltiples actividades nocturnas. Por supuesto también vale la pena admirar los lujosos yates y botes que llegan de todas partes del mundo.

Si llegas por crucero, aquí desembarcarás.

5. Muelle de los Muertos, Éste es el lugar romántico de Puerto Vallarta y uno que recién fue reinaugurado en el 2013. Con 665 metros que se internan en el mar, al finalizar encontrarás una plazoleta circular con la ya distintiva escultura de metal que asemeja una vela. El lugar cuenta con bancas para que admires el paisaje con buena compañía. Desde aquí también podrás tomar un barco, panga o taxi acuático para llegar a las playas del sur de Bahía de Banderas.

El Teniente Lázaro Blanco dice, en su Relación de Compostela, escrita en 1584, que los naturales llamaban a este valle “Xihutla” que quiere decir “lugar donde crece la hierba”. El capitán Francisco Cortés de San Buenaventura fue el conquistador de esta región. Narran los cronistas que cuando llegó al pueblo de Tintoque, estaban esperándolo a la entrada más de veinte mil indios armados y portando una banderita de plumas en la mano y otra en el carcaj.

Los españoles traían cuatro estandartes reales y una de damasco rojo con una imagen de La Purísima al frente y una cruz por atrás.

Al ver tantos enemigos, el fraile que venía con ellos se arrodilló para pedir el auxilio divino y al momento el estandarte de Damasco se llenó de resplandores infundiendo valor en los soldados y pavor en los indios, quienes se rindieron dejando a los pies del padre sus banderitas y sus armas.

Esto sucedió en marzo de 1525, y por eso, los españoles le dieron al valle el nombre de Banderas y así se llama hasta hoy. Puerto Vallarta, permaneció aislado del resto del mundo entre la sierra, el océano y el Río de Ameca, por muchos años. La actividad económica se encontraba en los pueblos de Cuale, San Sebastián y Mascota, en las minas de plata, por lo que el área que hoy corresponde a Puerto Vallarta se usó para la carga y descarga de suministros para las compañías mineras de los pueblos de las montañas. En ese momento el lugar se conocía como Las Peñas de Santa María de Guadalupe bautizado así por Don Guadalupe Sánchez Torres, comerciante de sal, quién visitaba regularmente Las Peñas, ya que las minas requerían grandes cantidades de sal para refinar la plata. Con la llegada de la familia de Don Guadalupe Sánchez

Torres el 12 de diciembre de 1851 y de otras familias, como la de Cenobio Joya, Apolonio de Robles, Cleofas Peña y Martín Andrade, entre otras; el puerto se empezó a poblar y su economía a crecer. Algunas familias se dedicaron a la agricultura, otras al ganado y otras al comercio.

Para 1880 ya contaba con 1500 habitantes y en 1885 el puerto se abrió oficialmente a la navegación nacional. En ese mismo año fue establecida una oficina de Aduana Marítima y se declaró al pueblo un lugar político y judicial oficialmente llamado Las Peñas.

Pero no fue sino hasta el 31 de mayo de 1918, que Las Peñas obtuvo el título de municipio y con él un nuevo nombre: Puerto Vallarta, en honor al gobernador de Jalisco Ignacio L. Vallarta.