La mexicana María del Rosario Espinoza aún no tiene claro el actual proceso olímpico, por lo que tiene la mira puesta en el Campeonato Mundial de Taekwondo en junio próximo.
La tres veces medallista olímpica dejó en el aire la posibilidad de participar en sus cuartos JJOO, ya que sus procesos previos a la justa deportiva no han sido los más brillantes.
“No quiero decir si estaré o no en Tokio, simplemente quiero ir paso a paso”, expresó a Mediotiempo. “Para mí es un orgullo tener tres Juegos Olímpicos y tres medallas olímpicas porque no ha sido nada fácil, los procesos que me han tocado han sido muy complicados”.
Tras la plata conseguida en los Juegos de Río 2016, Espinoza se tomó un descanso del que, paradójicamente, no se ha recuperado, pues reconoce que aún le falta para alcanzar su mejor nivel.
“Necesito adaptarme a las cargas de entrenamiento, sobre todo tener la mejor disposición para estar en el mejor aspecto físico que es lo que me interesa. Tomar el volumen, las cargas y ya después pulir el nuevo cambio de taekwondo“, agregó.
Con la humildad intacta, la oriunda de Sinaloa no se catalogó como la mejor atleta mexicana de la historia y aceptó que debe enfrentar el cambio generacional.
“No es que me considere o no, o diga ‘soy la mejor atleta’, simplemente me preparo para ser la número uno, ese es el objetivo principal todos los días”, expresó.
Asimismo, destacó la facilidad con la cual los prospectos mexicanos de hoy en día asimilan los cambios en el deporte, algo que a ella le ha costado trabajo.
“La nueva generación de deportistas viene a revolucionar el deporte desde la forma de pensar hasta cómo practicarlo y es algo bueno, sobre todo si se está implementando aquí en México”, sentenció.
