Los géneros musicales considerados populares están cargados de un sentido estético, pese a lo que se pensaría, ya que a partir de esta música se exponen contextos sociales, relaciones personales y construcción de una identidad, tal es el caso del reggaetón, opinó la maestra Dulce Asela Martínez Noriega, investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana.
Esto durante la conferencia que impartió en el Instituto de Investigaciones Humanísticas de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, donde abordó una reflexión sobre el género urbano, ya que actualmente ha sido criticado, rechazado e incluso estigmatizado, y no sólo el género como tal, sino que también las personas que gustan escucharlo.
Ya que dijo que tradicionalmente la estética se entiende como lo bello, valioso, trascendente, irrepetible, lo que genera una sensación trascendental, y de acuerdo a esta visión la música popular no podría considerarse estética, no obstante existen otras posturas científicas, como la de Sigmund Freud, que hizo una reflexión de los géneros musicales que no son clasificados como estéticos, cultos o doctos.
La doctora Martínez Noriega señaló que la estética musical tiene que verse desde una perspectiva de juicios de valor que pueda hacer la persona a partir de la música que escucha, y aseguró que existe estética musical en el reggaetón, que proveniente del contexto socio cultural global, ya que la música es un reflejo de lo que acontece en las sociedades, y en este caso, contextos donde se incluye temas como la discriminación, violencia y otras cuestiones sociales.
“Todos estos elementos que hoy en día se pueden visualizar, también se pueden escuchar a partir de estos géneros musicales, y es una estética que va conformando colectividades de jóvenes, que están escuchando estos contextos, que viven bajo ellos, y a partir de ahí generan procesos de identificación, relaciones sociales y construcción de una identidad”, acotó. El reguetón se originó a partir de su predecesor el reggae en español. El reggae en español nace y surge a mediados y finales de los años 1970 en Panamá a raíz de la comunidad jamaicana que se radicó en la Provincia de Colón, seguido de la ciudad capital y Bocas del Toro, donde gran parte vinieron por los ancestros que llegaron a Panamá desde antes, para participar en el proyecto de la construcción del canal interoceánico, incluyendo así a otros inmigrantes antillanos provenientes de Barbados, Trinidad y Tobago y otras islas del Caribe. Pero antes de que el género del reggae en español naciera, el reggae no era muy popular. Fue en 1977 que un inmigrante guyanés en tierras panameñas y en compañía de un DJ capitalino llamado Wasanga, introduce por primera vez el ritmo reggae en Panamá. Es así como surgen intérpretes como Rasta Nini, Calito Soul y el mismo Wasanga, quienes alcanzaron tener y dar las primeras presentaciones de reggae en vivo organizadas por el promotor Juan Bass.
Dentro de los ritmos del género panameño, se abarca la tradición de los famosos ritmos dichos riddims que salen de Jamaica así como también se hacen en Panamá.
Están el roots reggae, el reggae bultrón» y el reggae soca y la mezcla musical con estilos regionales panameños. También se usan las fusiones del reggae con otros estilos de países anglosajones y latinoamericanos.
