Camilo Ospina propone unir a la región de Latinoamérica

El ex ministro de Defensa colombiano, Camilo Ospina, presentó una iniciativa de integración económica y política en América Latina, y advirtió que se trata de un grupo de base sin ninguna vinculación con líderes políticos ni “de izquierda, ni de centro, ni de derecha” porque “contaminan”. Además, aseguró que la integración será una amenaza para el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Ospina, en entrevista con un Diario de circulación nacional destacó la grandeza de América Latina con 640 millones de habitantes, “el doble de población que Estados Unidos (320 millones)” y enfatizó que el objetivo es conseguir la unión de los países latinoamericanos y del Caribe en un gran bloque para lograr un futuro más próspero y democrático”, al estilo de la Unión Europea en el Viejo Continente.

El proyecto, bautizado como Unelaya, es parte de la Fundación bogotana Un Enlace Latinoamericano (Únela) y el político, para ondear su bandera, viajará por todo América Latina para recoger firmas de los ciudadanos y convocar a un referéndum de integración.

Su primera parada fue México, país al que considera la “cabeza del león de América Latina” por ser el más grande y con la economía más potente de la región y, de hecho, la décima del mundo.

“México es grande”, subrayó. Sin embargo, el reto para convencer a este país es todavía mayor porque “siempre ha mirado hacia el Norte y abandonado el Sur”. Ospina recordó también cómo México se olvidó de Centroamérica donde su influencia era enorme.

“Con Brasil, México, Argentina y Colombia juntos tenemos la tercera economía mundial y si sumamos a los otros 30 podremos alcanzar una economía totalmente viable. Somos supremamente ricos y grandes, pero solos no podemos hacer nada y seguiremos siendo pequeños frente a la Unión Europea o Estados Unidos. América Latina y El Caribe son una nación y tenemos que comportarnos como tal”, expresó Ospina, quien aspira a lograr una unión monetaria y un mercado común con la libre circulación de bienes y servicios por todo el continente.

Ante los males endémicos de América Latina –pobreza, violencia y una corrupción desorbitada– el político, aunque se le tilde de iluso, prefiere actuar “para hacer historia”.

“Las instituciones son débiles porque la organización política y la fuerza de la nación no existen. Este reto lo superaremos en la medida en que nosotros organicemos una estructura política fuerte con bases democráticas que no toleren la corrupción”, manifestó el también exembajador de la Organización de Estados Americanos (OEA).  “La justicia debe de aplicarse porque alguien que se roba la plata, mata a los niños y eso no tiene perdón de Dios”, sostuvo.

Ospina, por ello, dejó claro que en este proyecto de integración los líderes políticos (de izquierda, de derecha y de centro) brillarán por su ausencia porque no hacen más que “contaminar”.

PELIGRO PARA TRUMP

“Este proyecto lleva trabajándose desde hace muchos años”, dijo, en referencia a que no nació desde la llegada del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien tiene a América Latina (en particular a México) en el centro de la diana para disparar los dardos que, en su día, puedan poner en jaque a este proyecto de integración.

Para Ospina, quien también fue embajador de Colombia ante la Organización de Estados Americanos (OEA), “la integración es un peligro para Donald Trump porque esta fuerza no va a contar con él y sus propuestas “aislacionistas y populistas” van a aislar a la potencia norteamericana.

En su primera semana en el poder, el republicano, amén de sus promesas, retiró a Estados Unidos del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP, por sus siglas en inglés) y anunció que renegociará el El Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con sus vecinos México y Canadá. Sin margen de maniobra, firmó también su promesa bandera: levantar el gran muro en la frontera con México, que espera terminar en un plazo de dos años.

“América Latina va a imperar por sí misma. No necesitamos de un tercero. Trump se va a estrellar en algún punto porque es muy difícil que alguien dé patadas a todo el mundo y espere que no pase nada”, manifestó. “El mundo está hecho de fuerzas y equilibrios”, concluyó Ospina.