Repunta la venta de smartphones y se impone la modalidad del usado

A nivel global, en 2016 la venta de teléfonos sufrió un ligero traspié. Algunos analistas atribuyen esta merma a la recesión económica, otros a la ausencia de un objeto axiomático y una tercera facción, a qué la cantidad de líneas móviles igualó a la población mundial, lo que provocó la saturación del mercado. Cuando parecía que el abismo se tragaba a las pantallas, un estudio reciente indica que en los próximos 12 meses, al menos una de cada dos personas tiene planeado renovar su equipo. Cuáles son las principales motivaciones para este cambio y los lanzamientos más ilustres.

Las ventas de teléfonos inteligentes repuntarán en 2017, tras 3 años de retroceso, según una investigación de Dynamic Digital Consumers de Accenture. El sondeo, efectuado entre 26 mil consumidores de 26 países, revela que el 54% de los usuarios (un 6% más que el año anterior) tiene planeado avanzar hacia un smartphone más eficiente. La razón más convincente que esgrime el 51% es poder acceder a las últimas innovaciones. Mientras que el 45% pone como excusa el bajo rendimiento de su equipo actual.

Moto Z Play con Moto Mods. En los últimos días se filtraron algunas fotos de lo que podría ser el Moto X (2017) que sigue las curvas de diseño marcadas por el Moto Z. Las novedades se anuncian el próximo mes, en el MWC 2017 de Barcelona.

“Lo que intenta reflejar la encuesta no es tanto el rigor estadístico como la intención de los consumidores. A nivel local, como ocurre en el resto del mundo, el crecimiento está impulsado por los nuevos servicios que ofrece el 4G, como los pagos móviles, la reproducción multimedia y la transmisión de contenidos en vivo. Hoy, con una mayor velocidad de conexión y de procesamiento, con un teléfono de gama alta, se pueden ejecutar las mismas operaciones que desde la PC. La oscilación de la aguja se da también por aquellos Millennials que hacen su debut en el mercado móvil. Pese a que en nuestro país, el teléfono es un producto de primera necesidad también es un artículo de lujo” advierte Mariano Lavecchia Director Ejecutivo de Accenture.

Más de tres cuartas partes de los consumidores mundiales que planean adquirir un nuevo teléfono inteligente, están abiertos a otras formas no tradicionales, como recurrir a un terminal de segunda mano. En los Estados Unidos, esta cifra se eleva al 88%. Al igual que en el resto del mundo, esta tendencia explotó en la Argentina durante 2016. En la industria aseguran que en el corto plazo, el negocio del usado formal supere el 5% del total del mercado, lo que implica 650.000 unidades y una facturación cercana a los US$ 100 millones anuales, a un promedio superior a los 140 dólares por dispositivo.

Los consumidores argentinos cambian su teléfono en promedio cada 18 meses, más de la mitad lo hace para acceder a una mejor tecnología. El 54% de los equipos en uso son smartphones. La previsión de GSMA, la entidad que agrupa a las empresas de telefonía móvil de la región, apunta que para 2020 el 78% de los usuarios argentinos tendrá un smartphone.

Sin embargo, en 2016 la venta de teléfonos en el ámbito local estuvo empañada por el contrabando hormiga, el crecimiento del mercado del usado y el alto costo de los nuevos equipos. Con un volumen total estimado entre 9 y 9,5 millones de unidades producidas en Tierra del Fuego durante el 2016, la caída respecto del 2015 fue de entre 20 y 24% según un estudio de Carrier y Asociados.

Una de las herramientas que favorece el cambio son los asistentes de voz que están basados en un motor de inteligencia artificial como Google Now, Siri, Cortana o Alexa. Los consumidores jóvenes, entre 14 y 17 años, según el estudio de Accenture, son los que lideran su adopción: un 84% manifiestan estar interesados en aprovechar esta tecnología de inmediato. En esta misma franja, hay un 20% que afirma estar a punto de adoptar este sistema. Mientras que en la banda de 35 a los 55, un 35% asegura estar interesado en comenzar a probarlo.

Este método de interacción, al menos entre las nuevas generaciones, comienza a reemplazar las búsquedas tradicionales por las órdenes de voz. En la actualidad, el 85% considera que se siente más cómodo al ponerse en contacto a través del lenguaje natural que por medio de texto.

En cuanto a nuevas funcionalidades técnica, en la visión de los usuarios, las características mejoraron 12 puntos porcentuales (33% contra 45%) con respecto a 2016. En este rubro se incluyen desde la curiosidad por experimentar juegos de Realidad Virtual (VR) y Aumentada (AR), recibir recomendaciones sobre sus actividades frecuentes y disponer de un cuantificador para medir la actividad física y el estado de salud. Para desempeñar estas acciones, es inevitable pasar a un móvil que disponga de al menos 6 núcleos.

Para una mayor comodidad, un número creciente de usuarios expresó su intención de reemplazar su móvil si finalmente se concreta el paso de la tarjeta SIM física a la virtual. La eSIM es un nuevo estándar promovido por la GSMA, la asociación que representa a los operadores de redes en todo el mundo. Más de dos tercios están interesados en usar un dispositivo con un eSIM en los próximos 12 meses por «la capacidad de cambiar de proveedor de servicios más fácilmente». Hubo un 33% que se mostró frustrado por las dificultades operativas de un teléfono con doble chip. Mientras el 50% destacó que valora la simpleza de cambiar de compañía, sin necesidad de abrir el aparato para quitar el chip de comunicación.

El otro aspecto que promueve el salto tecnológico es incrementar los niveles de privacidad. Los modelos más confiables son aquellos que visten Marshmallow (Android 6.0) o superior de fábrica, presente en el 29,6% de los terminales del mercado. Estos equipos realizan el cifrado de datos de forma nativa, lo que evita que cualquier curioso pueda espiar la información guardada. Casi 9 de cada 10 encuestados (87%) afirman estar preocupados por la seguridad en transacciones financieras, como las compras online. Mientras que un 89% teme que alguien robe su identidad digital.