La entrada triunfal de George Washington un 13 de enero de 1776

CIUDAD DE MÉXICO.-George Washington es tal vez una de las figuras más conocidas en la historia y en especial en la formación de Estados Unidos como una nación independiente, de la cual después se convertiría en el primer presidente electo.

Durante la Guerra de Independencia entre las Trece Colonias con el Imperio Británico, que duró de 1775 a 1783, existe un enfrentamiento que marcó la carrera militar de Washington y que aceleró la derrota de los ingleses: la toma de Nueva York.

En 1776 comenzó el enfrentamiento conocido como ‘La Campaña de Nueva York y Nueva Jersey’, donde el ejército de Washington se enfrentó con el del británico William Howe en una serie de batallas que definirían el rumbo de la guerra.

Sería un 13 de enero de 1776 cuando George Washington entrara triunfal a la ciudad de Nueva York, después de recuperarla de manos inglesas.

Desde el inicio de la guerra, Gran Bretaña definió a Nueva York como un punto estratégico, por lo que Washington -ya como comandante en jefe del Ejército Continental- inició la campaña para recuperar la ciudad.

En 1775 comenzaron con el asedio de Boston, donde el ejército británico sucumbió al asedió de las tropas británicas, las cuales se retiraron.

Con esto, en 1776 George Washington entró triunfal a la ciudad de Nueva York en el mes de enero, donde colocó su ejército de manera permanente.

Esto duró pocos meses pues en agosto de ese mismo año, se enfrentó a Howe en la Batalla de Long Island, una de las más importantes de la guerra y la más grande registrada. Los ingleses mantuvieron cierto control en Nueva York, aunque siempre asediados por el Ejército Continental.

Durante esta campaña, Washington retiró su ejército a través del río East, lo que le valió el reconocimiento de sus enemigos como una de las mejores estrategias militares.

Después de esto continúo luchando en Nueva Yokr y Nueva Jersey, donde destacaron los enfrentamientos del río Delaware y la captura de mil mercenarios, así como la batalla de Princeton, que le valieron el reconocimiento como comandante del Ejército Continental.

Aunque para estas alturas la Declaración de Independencia ya había sido proclamada, la lucha de Washington por liberar a EU continuó hasta 1781 con la rendición de York, donde terminaron la mayoría de los enfrentamientos armados y culminó con el Tratado de París en 1783.