Secretario de Estado de Trump lanza ‘bombas’ contra China y Cuba

El empresario Rex Tillerson, nominado por Donald Trump para ser secretario de Estado de Estados Unidos, afirmó hoy que China «no ha sido un socio fiable» para lidiar con la amenaza nuclear de Corea del Norte.

No ha sido un socio fiable para usar toda su influencia para frenar a Corea del Norte», afirmó Tillerson en su audiencia de confirmación en el Senado estadunidense.

China ha demostrado una disposición a actuar con desidia en busca de sus propios objetivos, que a veces han entrado en conflicto con los intereses de Estados Unidos. Tenemos que lidiar con lo que vemos, no con lo que esperamos», subrayó el exjefe de la petrolera ExxonMobil.

El nominado del presidente electo Trump para dirigir la diplomacia estadunidense señaló que hay que «reconocer las realidades sobre China».

Durante la audiencia en el Senado se presentaron manifestantes contra Tillerson.

En ese sentido, Tillerson indicó que la construcción de Pekín de islas en aguas del Mar del Sur de China «es una toma ilegal de áreas disputadas sin consideración por las normas internacionales».

También incidió en que «las prácticas económicas y comerciales de China no siempre han seguido sus compromisos con acuerdos internacionales».

Pese a las críticas, el exempresario petrolero afirmó que Estados Unidos «necesita ver las dimensiones positivas» en su relación con el gigante asiático, pues el «bienestar económico» de ambos países está «profundamente entrelazado».

No deberíamos permitir que los desacuerdos sobre otros asuntos excluyan áreas de colaboración productiva», agregó.

Desde el mismo día que lanzó su campaña electoral, el 16 de junio de 2015, Trump ha venido defendiendo políticas proteccionistas para perjudicar las importaciones estadunidenses de China y de otros países a fin de fomentar el empleo en Estados Unidos.

Asimismo, Trump se ganó críticas del Gobierno de Pekín cuando el 2 de diciembre pasado habló por teléfono con la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-Wen, quien lo llamó para felicitarlo por su triunfo en los comicios presidenciales del 8 de noviembre.

La llamada rompió casi cuatro décadas de sensible política exterior de Estados Unidos hacia China y obligó a la Casa Blanca a salir al paso para recordar que el único Gobierno chino al que reconoce Washington desde 1979 es el de Pekín.

CUBA HA DADO MENOS DE LO QUE RECIBE…

Durante la audiencia, criticó también al proceso de acercamiento con Cuba, toda vez que consideró que, éste se desarrolló sin forzar a la isla a hacer «concesiones significativas» en el área de derechos humanos, y llamó a corregir ese aspecto.

Debemos adherirnos a estándares de rendición de cuentas. Nuestra reciente relación con el Gobierno de Cuba no estuvo acompañada por ninguna concesión significativa en cuanto a derechos humanos. No les hemos hecho rendir cuentas por su conducta.”

Sus líderes recibieron mucho, mientras que su pueblo recibió poco. Eso no sirve ni a los intereses de los cubanos ni a los de los estadunidenses”, añadió el candidato a titular de Exteriores.

Esas declaraciones encajan con la línea adoptada hacia Cuba por el presidente electo Trump, quien a finales de noviembre amenazó con poner fin al acercamiento diplomático a Cuba a no ser que el Gobierno cubano firmara con él «un acuerdo mejor».

Está por ver si, cuando llegue al poder el próximo 20 de enero, Trump da seguimiento a su amenaza con plantear una oferta de renegociación al Gobierno cubano de los acuerdos alcanzados con Obama para restablecer las relaciones diplomáticas y normalizar gradualmente los lazos entre las naciones.

Efe