Proponen brindar atención integral a trastornos alimenticios

Con el objetivo de brindar una atención integral a los trastornos alimenticios, como parte de las acciones en materia de salud mental, el pleno del Congreso del Estado aprobó la modificación al artículo 5° de la Ley de Salud del Estado, propuesta presentada por la legisladora Guillermina Morquecho Pazzi, presidenta de esta comisión legislativa.

Mediante esta modificación, se establece la obligatoriedad del Estado, a través de la Secretaría de Salud, de la atención a la salud mental y a los trastornos alimenticios, ya que son resultado de alteraciones de tipo emocional.

En la exposición de motivos de dicho dictamen, se indica que los trastornos de la alimentación también son conocidos como psicopatologías alimentarias como parte de alteraciones emocionales que conllevan una preocupación excesiva por la figura corporal.

Las personas que padecen algún desorden de este tipo dan importancia obsesiva a su autoimagen, lo que incluye principalmente los alimentos, alrededor de los cuales giran todos sus pensamientos, sueños, problemas y su vida en general.

Agrega que en este problema intervienen múltiples factores personales, familiares y sociales, aunados a la baja autoestima derivada de comparaciones propias y externas entre amigos y familiares, episodios traumáticos, la influencia de los medios de comunicación o fobia a modificar el peso corporal.

Así, las personas con este tipo de trastornos se someten a dietas o ejercicio excesivo que muchas de las veces pone en peligro su vida y su dieta puede ser modificada radicalmente, es decir, pueden comer raciones extremadamente pequeñas o exageradamente abundantes.

La legisladora indica que para la atención a estos problemas, se hace necesario un tratamiento específico, ya que las consecuencias de estos suelen ser graves, ya sea por los efectos directos sobre los hábitos alimenticios o el pensamiento suicida de quien lo padece, “por ello es indispensable darle prioridad a estos padecimientos originados por una salud mental cada vez más desequilibrada en nuestro entorno socio-cultural”, añade.