El Museo Louvre expondrá cuadro restaurado de Da Vinci

Tras 10 meses de restauración, el Museo del Louvre volverá a exponer a partir de mañana miércoles el cuadro «San Juan Bautista», una de las últimas obras de Leonardo Da Vinci, anunciaron fuentes del museo, en el que se conserva la Gioconda, la obra más conocida del artista italiano.
El cuadro lucirá colgado mañana miércoles en la Gran Galería del museo parisino, el más visitado del mundo con un promedio de nueve millones de visitantes al año.
La pintura, que tenía diecisiete capas de barniz, fue restaurada porque según los expertos del museo «con el tiempo se había teñido de color naranja» y porque ya no se podían percibir algunos detalles del cuadro.
Es «una restauración estética destinada a mejorar la lectura de la obra», explicó al diario Le Monde el director del departamento de pinturas del Museo del Louvre, Sébastien Allard.
Se estima que el cuadro, un óleo de 69 centímetros de alto por 57 de ancho, fue pintado por Da Vinci entre 1508 y 1513, por lo que sería una de sus últimas pinturas.
Previamente el Louvre había restaurado ya dos cuadros del genio italiano. Frecuentemente descrito como un arquetipo y símbolo del hombre del Renacimiento, genio universal, además de filósofo humanista cuya curiosidad infinita solo puede ser equiparable a su capacidad inventiva, Leonardo da Vinci es considerado como uno de los más grandes pintores de todos los tiempos y, probablemente, es la persona con el mayor número de talentos en múltiples disciplinas que jamás ha existido. Como ingeniero e inventor, Leonardo desarrolló ideas muy adelantadas a su tiempo, tales como el helicóptero, el carro de combate, el submarino y el automóvil. Muy pocos de sus proyectos llegaron a construirse (entre ellos la máquina para medir el límite elástico de un cable), puesto que la mayoría no eran realizables durante esa época.
Como científico, Leonardo da Vinci hizo progresar mucho el conocimiento en las áreas de anatomía, la ingeniería civil, la óptica y la hidrodinámica. Su asociación histórica más famosa es la pintura, siendo dos de sus obras más célebres, La Gioconda y La Última Cena, copiadas y parodiadas en varias ocasiones, al igual que su dibujo del Hombre de Vitruvio, que llegaría a ser retomado en numerosos trabajos derivados. No obstante, únicamente se conocen alrededor de 20 obras suyas, debido principalmente a sus constantes (y a veces desastrosos) experimentos con nuevas técnicas y a su inconstancia crónica. Este reducido número de creaciones, junto con sus cuadernos que contienen dibujos, diagramas científicos y reflexiones sobre la naturaleza de la pintura, constituyen un legado para las sucesivas generaciones de artistas, llegando a ser igualado únicamente por Miguel Ángel. Nació el sábado 15 de abril de 1452 «en la tercera hora de la noche», es decir, tres horas después del Ave María: a las diez y media. No es seguro si su nacimiento tuvo lugar en el castillo de Vinci, ciudad a unos 25 km en línea recta de Florencia, o bien en la casa materna de Anchiano, una pedanía a unos dos kilómetros de Vinci. Leonardo, descendiente de una rica familia de nobles italianos, fue hijo ilegítimo: su padre, messer Piero Fruosino di Antonio —un notario, canciller y embajador de la República de Florencia—, dejó embarazada a Caterina, una humilde joven de familia campesina, de quien se dice que pudo ser una esclava de Oriente Medio. Leonardo, o Lionardo según su nombre de bautizo,7 fue bautizado y pasó sus cinco primeros años en la casa de su padre en Vinci,7 donde fue tratado como un hijo legítimo. Tuvo cinco madrinas y cinco padrinos, todos ellos habitantes del pueblo.7 En este lugar, Leonardo recibió instrucción, aprendió a leer y a escribir, y adquirió conocimientos de aritmética. Sin embargo, prácticamente no aprendió latín, base de la enseñanza tradicional. El hecho de que tuviese una ortografía caótica muestra que su instrucción no estuvo exenta de lagunas; en todo caso no fue la de un universitario.
En aquella época, las convenciones modernas en los nombres de personas no se habían desarrollado todavía en Europa, por lo que únicamente las grandes familias hacían uso del apellido patronímico.
La gente del pueblo solía ser designada por su nombre, al que se le adjuntan todo tipo de precisiones útiles: el nombre del padre, el lugar de origen, un apodo, el nombre del maestro en el caso de los artesanos, etc.
Por consiguiente, el nombre del artista fue «Leonardo di ser Piero Da Vinci», cuyo significado es «Leonardo, hijo del maestro Piero De Vinci»; sin embargo, el término «Da» lleva una mayúscula para denotar que se trata de un apellido.