Caminos de luz para andar en bicicleta

CIUDAD DE MÉXICO.-Polonia ha causado sensación entre los ciclistas. Demostrando una amabilidad con el medio ambiente, se presentó el primer carril luminoso que se recarga gracias a la energía solar.  En la comunidad norteña de Lidzbark Warminsky, se propuso la idea de un camino luminoso color azul eléctrico que puede brillar en la oscuridad hasta por 10 horas después de que cargó energía del sol durante el día, desarrollado por la empresa TPA Insytut BADAN.

La inspiración llegó cuando hace dos años, en los Países Bajos se creó un carril estrellado, en la comunidad de Nuenen, sitio donde vivió el pintor Van Gogh. La diferencia con respecto a  aquél, es que el Estudio Roosegaarde se inspiró en la obra del autor llamada La Noche estrellada y decidió poner azulejos fosforescentes que iluminaron alrededor de cinco kilómetros.

Los peatones también salen beneficiados con este tipo de caminos iluminados, cuya energía dura un promedio de 10 horas.

En Polonia, buscando que se adapte a otras partes del mundo para economizar energía y crear armonía con el medio ambiente, la empresa TPA en voz de su director Waldemar Krolikowski, acepta que “las partículas luminiscentes de este carril dependen exclusivamente del sol, por lo que es diferente al de Holanda. Además  de que busquemos salvaguardar al ciclista o al peatón para que vea en la noche, se trata de que armonice y adorne la ciudad”.

Ya con anterioridad se había buscado una solución para que los ciclistas pudieran tener oportunidades de transitar sin peligros diurnos. Debido a que muchas personas no adoptan las medidas de seguridad como cascos o chalecos reflejantes, la empresa Pure Fix creó en 2014 la bicicleta luminiscente en donde todo el cuadro brillaba para su fácil percepción.

Hemos ido mejorando la pintura y llegando a la conclusión de que sólo el cuadro y las llantas son importantes para iluminarse con un costo aproximado de 400 dólares”, mencionó Zach Schau, cofundador de Pure Fix, cuya base está en Nueva York.

En México la situación es un  más incómoda. A la tremenda batalla entre ciclistas y automovilistas que se libra a diario por un pedazo de terreno en las calles, se debe reflexionar en la poca educación vial de las personas. Aunque existen carriles confinados a los ciclistas, la pintura en la mayoría de ellos está desgastada y apenas es visible.

En general, la pintura de tránsito está formada por pigmentos o pequeñas partículas inorganicas, insolubles, cuya labor es suministrar el color y ser anticorrosivas para dar estabilidad ante los agentes ambientales y químicos.

Carmen Salgado, usuaria diaria de Eco bici, cuyo trabajo es en Lomas de Chapultepec y realiza un viaje constante de ocho kilómetros, menciona la inseguridad que siente a la hora de mayor tráfico.

Hay tramos donde no existe separación con los automóviles, además de que el gobierno propuso un camino compartido entre ciclistas y autobuses, lo cual ocasionó la muerte el año pasado de una mujer en Paseo de la Reforma y la absolución del chofer al que no encontraron culpable. Mucho de eso pasa por la poca señalización o la falta de visión en el asfalto, de una pintura que determine con exactitud los límites para los automóviles”.

Únicamente contando a los usuarios de Ecobici, en la Ciudad de México existen 197 mil personas que andan en este medio de transpote, pero tomando en cuenta estudios de Greenpeace México, se estima que sea el doble de esa cantidad los que circulan por las calles con peligro. Según manifestó Areli Carreón, activista de Greenpeace,  “los carriles de bicicleta para los mexicanos han sido mal trazados y no se han convertido en una buena opción. De 2010 a 2015, el incremento de accidentes en bicicleta fue de un 20 a un 38 por ciento y mientras no mejore el transporte público, difícilmente podrán identificarse los carriles para los ciclistas”.

En Polonia, sin embargo, presumen al mundo el primer carril luminoso sustentable que no afecta al medio ambiente. Son pioneros en implementar este modelo que además de orientar a la movilidad nocturna con el fin de evitar accidentes automovilísticos, no gasta electricidad, ya que su asfalto está mezclado con un material especial que emite luz recargable gracias a la energía solar. De esta manera, se espera que el interés crezca en la pequeña región de Lidzabrk Warminsky y de paso incremente el turismo en la zona.