El titular de la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Coepris), Carlos Alberto Aguilar Acosta informó que dentro de los operativos para la detección de carne contaminada con clembuterol se hizo el aseguramiento de 126 kilogramos que no contaban con la documentación que respaldara su origen.
“Hemos implementando el operativo de vigilancia en productos cárnicos, e hicimos algunos aseguramientos por no presentar con documentación que respaldara su origen lícito y se hicieron tres suspensiones a carnicerías”, dijo.
Indicó que los establecimientos de venta de carne deben de comprobar con documentos que la carne que comercializan viene de lugares autorizados como son los diferentes rastros para que sea seguro consumirla para la población, y al no hacerlo se decomisaron 126 kilogramos.
El funcionario estatal aseveró que este fin de semana se realizaron trabajos en coordinación con el Ayuntamiento capitalino, lo que derivó en que se reabriera parte del rastro municipal, y se espera que en breve el municipio cumpla con todos los requerimientos que se le solicitaron para operar al cien por ciento.
Agregó que hasta el momento no han detectado centros de matanza clandestinos por el cierre del rastro de San Luis potosí, pero se continuará con la vigilancia para evitar que haya riesgos para la salud de los potosinos por consumir carne que no cumpla con las normas de salubridad.
Aseguró que la carne que saldrá del rastro cumple con la calidad, puesto que las líneas de matanza que se abrieron son para cerdos y otras especies, por lo que dijo que no hay riesgo sanitaria actualmente en el estado por la venta de carne y se continuará con la vigilancia y el muestreo en los diferentes rastros.