Egresada de Posgrado de la UASLP obtiene Premio Nacional del INAH

 

La conservación del patrimonio cultural es un área de oportunidad para los profesionistas, en especial de aquellos que se especializan en rubros interdisciplinarios que contribuyen a interpretar los problemas del patrimonio in situ, opinó Gabriela Mora Navarro, jefa de Conservación de Patrimonio Arqueológico In Situ, del Instituto Nacional de Arqueología e Historia (INAH) y egresada de la Maestría en Ciencias en Geología Aplicada del Instituto de Geología de la Facultad de Ingeniería de la UASLP.

Gabriela Mora, fie acreedora al premio Paul Coremans por la mejor tesis de Maestría 2016, en la categoría de conservación que otorga anualmente el INAH, a los trabajos que hagan una contribución o impacto en la conservación del patrimonio cultural de nuestro país.

La egresada de la UASLP, comentó que su trabajo de maestría es un estudio de una estructura arqueológica, el edificio B, ubicado en la zona arqueológica del Templo Mayor, en la Ciudad de México, que abarca una aproximación desde las Ciencias en Geología Aplicada, para estudiar los mecanismos de alteración de los materiales pétreos que conforman esta estructura.

“Es un edifico muy peculiar, porque tienen una fachada de cráneos tallados en diferentes tipos de piedra, entonces tenía una problemática compleja que requería una aproximación multidisciplinaria”, acotó.

Dijo que fue con este trabajo que contribuye en los estudios de la piedra, que participó en la convocatoria, y precisó que fue una experiencia enriquecedora la experiencia de ser admitida y trabajar con la Facultad de Ingeniería, pues comentó que proviene de la formación de conservación, y este posgrado le dio un enfoque interdisciplinario.

Mora Navarro detalló que con esta formación interdisciplinar en conservación y geología, se pudo integrar a los Programas de Conservación del Patrimonio Arqueológico en México, como jefa de la Conservación de Patrimonio Arqueológico In Situ, área que requiere grandes esfuerzos para hacer frente a retos importantes como: el número de zonas arqueológicas que hay, fungir como interlocutores con otras disciplinas, etc.

Además reveló que en el país es fuerte el área de conservación arqueológica, principalmente en el área de investigación y estudios, pues en el INAH se realizan trabajos de la mano con geólogos y especialistas de áreas, no obstante dice que faltan especialistas intermedios o interdisciplinarios.

“Creo que hay un gran campo de oportunidad, es un área que nos ofrece una visión de los problemas que tiene el patrimonio, como manejo de corrientes, agua, materiales con que están hechos, etc.; entonces toda la rama de ciencias, en particular la ingeniería tiene mucho que aportar en la comprensión de estos problemas”, finalizó.