«Exigimos que los funcionarios del ayuntamiento dejen sus actividades político-electorales en favor de proyectos personales y se preocupen por el fortalecimiento interno de la institución pública a la que se deben, empezando por su Comisión de Vigilancia», así lo señaló Maximino Jasso Padrón, Secretario General en funciones de Presidente del Comité Directivo Municipal del Partido Acción Nacional.
Recordó que hace cerca de tres meses la regidora del albiazul Laura Gama Basarte solicitó que se atribuyeran facultades reglamentarias a la Comisión de Vigilancia, sin embargo en el propio cabildo se negó a analizar este tema, pese a la importancia que tiene este asunto como es el de generar una ordenanza interna que vigile a la perfección a los servidores públicos.
“La Comisión de Vigilancia necesita contar con atribuciones para investigar cualquier acto de corrupción u opacidad; de ser así, en este momento estaríamos hablando de un seguimiento certero a las adquisiciones de obras sin licitar o el caso de Sandra Sánchez Ruiz, los servicios mecánicos y los actos irregulares del síndico municipal, entre otros”.
Refirió que si existe una cerrazón hacia esta solicitud es porque los funcionarios del ayuntamiento insisten en tomar decisiones improvisadas y sin contrapesos que afectan la credibilidad de la administración municipal, por ello exhortó a quienes encabezan esta comisión para que se apliquen las mejores prácticas de transparencia en pro de la rendición de cuentas.
Asimismo, el líder albiazul en la capital potosina dijo que de no trabajar y reunirse a la brevedad, existen recursos legales e instancias a los que se puede acudir, como el Congreso del Estado o la Auditoria Superior del Estado, para generar una iniciativa que ordene nuevas atribuciones a la Comisión de Vigilancia y se establezcan modificaciones al reglamento.
«Hacemos un llamado para que la administración municipal resuelva a la brevedad, apelando al sentido mínimo de la responsabilidad que conlleva el servicio público, lamentaríamos tener que recurrir a este tipo de recursos para lograr lo que por obligación debe solucionar el gobierno municipal”.
Sin duda el principal síntoma de esta administración es la opacidad y la participación de los regidores panistas para combatir fenómenos como la corrupción e impunidad ha sido puntual y si no se le confieren más atribuciones a la comisión de vigilancia del ayuntamiento, no habrá contrapesos suficientes, la rendición de cuentas continuará anulada y tampoco habrá capacidad de exigencia para atender cuestiones básicas y de primera necesidad en una gestión municipal.