La luna de miel que salvó a Nintendo; te conmoverá

Si eres fanático de la marca, bien; y si no, también. Esta es una historia romántica y militar que afectó a la industria de videojuegos sin saberlo.
Prepárate y disfrútala.
LA HIJA DEL FUNDADOR DE NINTENDO
La vida para Tei Yamauchi parecía ir de mal en peor.
Casada por compromiso para mantener el nombre y la empresa que su padre fundó -difícil al ser mujer- tuvo que aguantar las frecuentes infidelidades de su marido.
Luego su matrimonio produjo sólo dos niñas, por lo que se aseguraba que otra generación de mujeres Yamauchi tendría sufrir las penurias de un matrimonio arreglado.
La vida matrimonial de su hija mayor, Kei, increíblemente fue todavía peor. Aunque la pareja produjo al primer heredero Yamauchi varón en tres generaciones, el esposo de Kei -mujeriego agobiado por las responsabilidades de la empresa familiar- un día lo abandonó todo: esposa, hijo y empleo.
Ello llevó deshonra a la familia Yamauchi, dio paso a un niño arrogante y resentido y obligó a Tei a ayudar con las labores de la empresa familiar.
El nieto de Tei unos años antes, mostrando que tenía cara de soberbio desde chiquito. Imágen vía hobbiconsolas.com
Ah, la empresa familiar. Tras años de esfuerzos y dificultades, el taller que el padre de Tei había fundado ahora era una empresa exitosa con productos que se vendían en todo Japón, tanto así que el humilde tallercito ahora era sólo uno de los muchos edificios y terrenos que la empresa poseía alrededor de la en la ciudad donde Tei y su familia vivían.
El año era 1945 y la ciudad de Kyoto, como muchas de las otras grandes ciudades japonesas, era blanco de los bombardeos estadounidenses, por lo varias de las inversiones en bienes raíces de la empresa de la familia de Tei -literalmente de la noche a la mañana- se habían convertido en polvo.