Un operativo del Ejército con agentes federales y estatales de la Fiscalía General de Oaxaca frustró el intento de extorsión a la empresa eólica española Gamesa y logró liberar a dos directivos por los cuales se exigía el pago de 500 mil pesos.
“La liberación de los empresarios Jesús Abril Medina y David Manzo se efectuó con éxito y sin novedad”, dijo el secretario de Seguridad Pública, Jorge Alberto Ruiz Martínez.
El funcionario calificó el hecho como un intento de chantaje encabezado por una persona a quienes testigos identifican como Francisco López Sánchez.
Al parecer, acompañado por presuntos campesinos, ingresó a la oficina de Gamesa.
El líder del grupo pidió a los empresarios 500 mil pesos con el argumento de que “la empresa debería de repartir al pueblo sus ganancias y evitar eventuales bloqueos al parque eólico de Gamesa”.
También exigieron el dinero a cambio de liberar a los inversionistas y empleados.
Los directivos convencieron a los colonos para que les permitieran comunicarse a sus oficinas centrales en la Ciudad de México, pero el amago fue notificado a la Policía Federal que, a su vez, instruyó a su personal en la región del Istmo para llevar a cabo el operativo.
IMPIDEN EXTORSIÓN HACIA ESPAÑOLES EN OAXACA
Integrantes del Ejército mexicano y Agentes investigadores de la Fiscalía General de Oaxaca, en la zona del Istmo de Tehuantepec, frustraron anteayer un intento de extorsión a la empresa española eólica Gamesa al rescatar a dos de sus directivos tras ser retenidos por un grupo de personas en la región del Istmo de Tehuantepec que exigieron 500 mil pesos a cambio de su liberación.
El operativo, ocurrido la tarde del pasado jueves, involucró a la 46 Zona Militar organizada con las fuerzas especiales del gobierno federal y estatal para el rescate de los directivos de la empresa de capital ibérico, técnicos y personal administrativo, reunidos en la oficina de la empresa, ubicada en la avenida 5 de Mayo, Primera Sección, en el municipio de Juchitán de Zaragoza.
La liberación de los empresarios Jesús Abril Medina y David Manzo (ambos de nacionalidad española) se efectuó con éxito y sin novedad”, aseguró el secretario de Seguridad Pública, Jorge Alberto Ruiz Martínez.
El funcionario calificó el evento como un intento de chantaje encabezado por un habitante de la localidad, a quienes testigos identifican como Francisco López Sánchez, Chico Chente.
Al parecer, López, acompañado por un grupo de personas, presuntos campesinos, ingresó a la oficina de la empresa Gamesa.
El líder del grupo pidió a los empresarios 500 mil pesos con el argumento de que “la empresa debería de repartir al pueblo sus ganancias y evitar eventuales bloqueos al parque eólico de Gamesa”.
Los supuestos colonos exigieron el dinero a cambio de la liberación de inversionistas y empleados de la transnacional.
El grupo se presentó como los legítimos propietarios de los predios donde la empresa Gamesa instalará los aerogeneradores que servirán para el aprovechamiento del viento de esa zona zapoteca”, apuntó Ruiz Martínez.
El argumento de López Sánchez fue que el cobro de dinero serviría para “el cumplimiento económico por concepto de apoyo a la localidad, en los rubros de pagos de alumbrado público y festividad del barrio”.
Durante su retención, los directivos lograron convencer a los colonos para que les permitieran comunicarse a sus oficinas centrales, en la Ciudad de México. El amago fue notificado a la Policía Federal, que a su vez instruyó a su personal instalado en la región del Istmo para llevar a cabo el rescate de los inversionistas extranjeros.
El operativo involucró a elementos del Ejército, Fuerzas Especiales de la AEI y Policía Federal, consiguiendo el rescate de los empresarios, aunque los colonos escaparon al percatarse del operativo. No hubo detenidos.
De acuerdo con los directivos de la empresa, ninguno de los integrantes de la banda portaba armas de fuego.
Los directivos no sufrieron ningún daño físico y fueron trasladados al Hotel Santa Cecilia, en Juchitán, donde están despachando con personal policiaco encargado de su custodia”, informó el secretario de Seguridad Pública.
VIOLENCIA SE EXPANDE EN JUCHITÁN
De acuerdo con cifras de la Fiscalía General de Oaxaca, la región del Istmo de Tehuantepec se ha convertido en una de las más peligrosas de la entidad, ya que en 16 de sus municipios se han registrado 124 homicidios en tan sólo siete meses.
En esta región, de enero a julio fueron perpetrados 124 asesinatos, 16% más de los registrados en el mismo periodo durante el año pasado.
La misma Fiscalía reconoce que el municipio de Juchitán de Zaragoza es una de las ciudades más sangrientas del estado, puesto que, apenas la semana pasada y a pesar del operativo implementado en la región, ocho personas fueron asesinadas a manos del crimen organizado.
Además, el fiscal del estado, Héctor Joaquín Carrillo Ruiz, aseguro que, luego de la captura del comandante de la Policía de Juchitán, Valentín Hernández López, diez elementos más de esta corporación policiaca podrían estar involucrados en los recientes hechos delictivos que aquejan a la ciudad zapoteca.
No obstante, de acuerdo con la dirección de comunicación social de Juchitán de Zaragoza, el presidente municipal de este municipio, Saúl Vicente Vásquez, asegura que esta información es falsa, pues “carece de sustento”, y que él, como jefe directo, no tiene ningún reporte reporte de faltas o ausencia de elementos de tropa.
Apenas el 14 de septiembre fue asesinado el juez segundo de Juchitán de Zaragoza, Eliseo Martínez Bello, al igual que dos trabajadores de este juzgado.
Un día después, en esta misma ciudad, un hombre fue acribillado mientras que su hijo de cinco años le fueron provocadas diversas lesiones.
Durante la noche de ese mismo día se confirmó el asesinato de una mujer y un hombre, quienes iban abordo de un vehículo en las inmediaciones del municipio de El Espinal, ayuntamiento colindante con Juchitán de Zaragoza.
