Familiares de las presuntas víctimas del ex militar Filiberto Hernández Martínez, acudieron a la Ciudad de México, a solicitar el apoyo de las autoridades ante la posibilidad de que el feminicida de Tamuin, obtenga su libertad.
No obstante en San Luis Potosí, hubo reacciones al respecto, pues el magistrado presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado Luis Fernando Gerardo González, expuso que aún no queda absuelto, pues fue señalado por otras causas penales.
En este sentido, aseguró que aún no hay un posicionamiento definido por parte de la autoridad judicial “Ahorita se habla de una de las causas nada más, pero son dos o tres, entonces tiene que ser una revisión en conjunto de las causas penales de los ofendidos, porque son 4 personas las que terminaron ahí como ofendidas” agregó.
Además, aceptó que existe una preocupación general en el caso del ex militar, aunque descartó cualquier tipo de presión para favorecer al imputado, ya que el juez lleva el caso con absoluta autonomía en su jurisdicción (Ciudad Valles).
Mientras tanto, el Procurador General de Justicia en el Estado, Federico Garza Herrera, informó que Filiberto Hernández, aún no está en libertad y la Procuraduría Estatal hará lo conducente para impugnar las resoluciones del juez, aunque “más bien es la familia de la víctima, la que deberá interponer un amparo ante la resolución del juez apoyados por la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, toda vez que son los que desde un inicio los están apoyando en esa materia”.
Cabe destacar que existen tres procesos que tiene el imputado y que están en el juzgado de Ciudad Valles.
Además de acuerdo a los antecedentes, el ex militar Filiberto Hernández recibió el auto de formal prisión en marzo de 2015. La defensa apeló y en septiembre de 2015 la quinta sala del STJE le revoca el auto y le dan libertad por ese caso de homicidio de una menor de 14 años Adriana Martínez. Sin embargo, el enfrenta otros procesos por homicidio de tres niñas de 4, 11 y una joven de 30 años.
En julio del 2014, cuando se detuvo a Filiberto Hernández, confesó como violó y asfixio a Eliehoenai Chávez, y a cuatro niñas más a quienes arrojó los cuerpos cerca de los cañaverales en el municipio de Ciudad Valles. Aunque las desapariciones se registraron desde 2010 con una niña de 12 años, le siguió Itzel Romany de 13 años en 2013, después Adriana Martínez de 13 años en el 2014 y Dulce Jimena quien se perdió en abril del 2014. Aunque sólo Eliehoenai Chávez era la única adulta con 32 años de edad y desparecida también en el 2014.
Filiberto Hernández se dedicaba en el municipio de Tamuín a dar clases de catecismo, Taekwondo, y Zumba.