Banxico reporta salida de 4,764 mdd: Analistas

México registró una salida de capitales por primera vez desde la crisis económica de 2009 por la depreciación del peso, opinan analistas.
La inversión de cartera, el llamado capital golondrino, registró un saldo negativo por 4 mil 764 millones de dólares en elsegundo trimestre, la primera salida desde finales de 2009.
Además es el déficit de inversión de cartera más pronunciado desde el primer trimestre de 2009, cuando se registró una fuga de 21 mil 397 millones de dólares, según la balanza de pagos del Banco de México (Banxico).
El flujo golondrino que abandonó el país equivale a 86 mil 229 millones de pesos, que representa la tercera parte del presupuesto de la Secretaría de Educación Pública y dos terceras parte del gasto de la Secretaría de Salud.
La deuda pública propició el saldo negativo, pues registró una salida neta de 5 mil 479 millones de dólares, la más pronunciada en la última década.
En tanto, el sector privado registró una entrada neta por mil 45 millones de dólares, casi una cuarta parte de lo que ingresó el trimestre anterior.
Para José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, la salida de capitales se debió al deterioro del perfil de riesgo de la deuda mexicana, lo que se vincula con la depreciación del tipo de cambio.
Los inversionistas perciben mayor riesgo en la deuda mexicana y prefieren deshacerse de la tenencia para colocar sus capitales en otros países, expuso el economista.
“La salida del segundo trimestre todavía no representa un riesgo para México y tampoco una fuga de capitales, pues el flujo es manejable, pero es una señal de alerta”, opinó de la Cruz.
Se pueden continuar registrando salidas de capitales relativamente menores en los siguientes meses, pero si se prolongan dos o tres trimestres y superan los 15 mil millones de dólares en el acumulado, entonces sí van a representar un problema de financiamiento para el país, advirtió el especialista.
Alejandro Cervantes, economista senior de Banorte, consideró que la depreciación del peso motivó a inversionistas a dejar el mercado de deuda pública del país.
Coincidió en que la salida no supone una fuga de capitales, pues el flujo fue menor relativamente.