- Los manifestaciones que realiza en el puerto de Lázaro Cárdenas, han detenidos los insumos y productos que llegaron de Asia y que hace semanas debieron entregarse en fábricas de San Luis Potosí para complementar el ciclo de exportación
- Afirma el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos, que en que en el país se “configura” una crisis de gobernabilidad, en la que el Estado Mexicano va perdiendo la batalla
Las movilizaciones que realiza la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE en el país están afectando directamente a San Luis Potosí, en virtud de que los bloqueos que realiza en el puerto de Lázaro Cárdenas, en Michoacán, están detenidos todos los insumos y productos que llegaron de Asia y que hace semanas debieron entregar en fábricas de San Luis Potosí y Querétaro para complementar el ciclo de exportación.
Lo anterior lo informó el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos, al puntualizar que en que en el país se “configura” una crisis de gobernabilidad, en la que el Estado Mexicano va perdiendo la batalla.
Debiera imperar la legalidad y el Estado de derecho sin discrecionalidad alguna en estos momentos, comentó.
“No puede sostenerse una mesa de diálogo con quienes, en este mismo momento, siguen en las calles impunemente violando la ley”, aseveró.
En 10 semanas de bloqueos y manifestaciones se observaron bloqueos y manifestaciones de un grupo de personas que cometen innumerables actos ilegales, sin que haya sanciones.
Por ejemplo, los cierres a los aeropuertos son un delito del ámbito federal, pero la estrategia del gobierno federal es el diálogo.
Sin embargo, la voz del gobierno “se desvanece por una falta de contundencia y de respuestas para la sociedad que sigue siendo la gran perdedora. Diálogo sí, pero ¿a qué costo?, ¿con qué resultados?”, cuestionó De Hoyos.
Hay daños irreversibles para los habitantes, para negocios, turismo, seguridad y tranquilidad de las personas, de manera que pareciera que la sociedad mexicana está “secuestrada” por quienes “gritan y vociferan y creen tener la razón”. Uno de los daños es que en Oaxaca, a pesar de que iniciaron las Fiestas de la Guelaguetza, cuatro de cada 10 turistas cancelaron su viaje a ese sitio.
Hay restaurantes, hoteles y tiendas a punto de quebrar porque casi la mitad de los que iban a gastar no lo harán.
Los bloqueos que se registran en Chiapas provocaron pérdidas por 450 millones de pesos a los campesinos, vendedores de fruta y a todos los sectores involucrados en esa actividad agrícola.
El otro problema es que en el puerto de Lázaro Cárdenas, en Michoacán, están detenidos todos los insumos y productos que llegaron de Asia y que hace semanas debieron de estar en fábricas en Querétaro, en San Luis Potosí o en Saltillo para complementar el ciclo de exportación.
“A más de 10 semanas de pérdidas, ¿quién va a garantizar que el diálogo y la voluntad política servirán para garantizar los destrozos y las pérdidas que no paran?”, dijo el líder patronal.
Pidió a la Secretaria de Gobernación asumir su responsabilidad y hacer vumplir la ley.
Advirtió que urgen acciones decididas, “un país en el que de una vez y por todas impere la ley y el Estado de Derecho, sin pretextos, sin discrecionalidad”.
Añadió que es momento de mostrar determinación de que el país se va a conducir con justicia y sin excepciones