Un desvío de fondos por casi cinco millones de pesos hizo empleado de una empresa, a su cuenta personas, de recursos de su centro de trabajo. Fue detenido por agentes policiales y ya está a disposición del Juez, quien lo reclama.
Un hombre dijo «se le hizo fácil» realizar varias transferencias bancarias de la empresa donde laboraba, hacia una cuenta personal, por un monto cercano a los 5 millones de pesos, se trata de Jesús Darío N., de 33 años de edad.
El antes señalado fue aprehendido por la Policía Ministerial del Estado, con base en un mandamiento judicial obsequiado por el Juez Segundo del Ramo Penal, por la presunta comisión del delito de Robo Calificado.
La denuncia por la sustracción de un total de 4 millones 781 mil 752 pesos fue presentada por Javier, representante legal de una empresa de Ingeniería Industrial, quien refirió que en abril de 2014, la empresa por él representada, contrató los servicios del inculpado para que se encargara de todo lo referente a la contabilidad de ese negocio, y durante poco más de un año todo parecía transcurrir con normalidad.
Sin embargo, en septiembre del año pasado se realizó una auditoria y en una revisión a una de las cuentas bancarias de la empresa, se detectaron 32 movimientos de transferencia a una cuenta personal de Jesús Darío, dándose cuenta entonces de un importante desvío de dinero.
Al hacerle saber al ahora indiciado toda la serie de irregularidades y trasferencias bancarias detectadas, éste respondió que se le había hecho fácil realizar esos movimientos financieros para cubrir algunos gastos personales.
Pero dijo estar en la mejor disposición de pagar, pero minutos después, desapareció del lugar sin que se volviera a saber nada de él, por lo que se optó por presentar la demanda respectiva. Una vez que el Juez de la Causa resolvió ejercitar la acción penal, los agentes ministeriales comisionados al caso realizaron una serie de trabajos de investigación que culminaron con la aprehensión de Jesús Darío cerca del parque industrial El Marqués, en la ciudad de Querétaro, de donde fue trasladado a la ciudad de San Luis Potosí, ingresándolo a los separos de la Policía Ministerial a efecto de ponerlo a disposición de la autoridad.
