LA PAZ, BCS.-Los restos de un fósil de ballena serán trasladados al Museo de Historia Natural de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS) para llevar a cabo trabajos de preparación y su posterior exhibición.
El investigador del Departamento Académico de Ciencias Marinas y Costeras de la UABCS, Gerardo González Barba, señaló que aún no se determina la fecha exacta del traslado, luego del hallazgo de esta osamenta en el rancho “Piedras Coloradas”, al norte de Loreto.
El descubrimiento de la osamenta se debe a los efectos del Huracán Odile, el cual facilitó su exposición en la superficie
El profesor-investigador de la UABCS, indicó que las autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se encuentran en pláticas para definir el destino final del fósil.
No obstante, anotó, existe la probabilidad de que una vez que se le apliquen técnicas de limpieza para que el material quede listo para exhibición, sea trasladado al Museo de las Misiones de Baja California en Loreto para su ubicación y presentación pública.
La osamenta está compuesta por una mandíbula, que se cree pudo haber pertenecido a un “balenoptérido”, un género de ballena barbada, conocida comúnmente como “rorcual”.
No obstante, González Barba destacó que será hasta después de la preparación que se podrá saber a qué especie pertenece el fósil.
Por otra parte, se estimó que el descubrimiento de la osamenta se debe a los efectos del Huracán Odile, el cual facilitó su exposición en la superficie y permitió que los habitantes locales pudieran realizar el hallazgo.
En cuanto a la edad, es muy probable que haya pertenecido a una época transicional entre el Plioceno y el Pleistoceno, señaló el paleontólogo.
El sedimento en el que se encontró el fósil está formado por areniscas y material volcánico.
Estudios que se han hecho en la formación geológica en la que se halló el fósil, apuntan a que ésta surgió en el Pleistoceno; es decir, hace 2.5 millones de años, según la Comisión Internacional de Estratigrafía.
González Barba indicó que, principalmente en las areniscas, había otros organismos marinos incrustados como grandes pectínidos, ostiones y balanos.
Además, junto a la osamenta también se encontró una costilla, por lo que esperan hacer otra visita al lugar del hallazgo con la esperanza de encontrar más fósiles y continuar con los trabajos de recuperación.