Al más puro estilo de los Grandes Premios de Mónaco más memorables, el de la presente temporada de la Fórmula Uno retomó ese espíritu de principio a fin, luego de que Lewis Hamilton terminara con un sequía de siete meses sin victoria y se metiera de lleno a la lucha por un nuevo título de la máxima categoría del deporte motor.
El británico firmó la victoria 44 de su carrera en el Gran Circo luego de aprovechar a la perfección el bajón que experimentó su coequipero Nico Rosberg, quien nunca se mostró confiado sobre el trazado de tres mil 337 metros sobre las calles del principado, pero sobre todo, tomando ventaja de un error garrafal cometido por Red Bull en agravio de Daniel Ricciardo.
Un inusual arranque con el Safety Car, después de que una lluvia intensa se hiciera presente instantes anteriores al inicio, fue el primero de los elementos que hizo del Gran Premio de Mónaco de ayer uno de los eventos más emocionantes de los últimos años.
Ocho giros después de un inicio controlado, con los 22 pilotos arrancando con neumáticos para lluvia intensa, la pista cambió de complicada a óptima para tener una carrera en pleno, en la que Ricciardo se enfilaba a concretar lo que había iniciado un día atrás al ganar la pole, sin embargo, no contaría con un Hamilton que primero daría cuenta de un Rosberg titubeante y que después impondría su jerarquía de actual campeón de la categoría.
Luego de que la pista comenzara a secarse, la carrera se tornó en un bazar de estrategias de parte de los pilotos y los equipos, pues de inmediato la mayoría comenzó a cambiar las gomas de lluvia intensa por las intermedias, aunque en el caso de Hamilton, éste no esperó al cambio de llantas hasta que el asfalto estaba completamente seco, dejando las de lluvia intensa por las lisas ultra suaves a la altura de la vuelta 31.
Fue en ese punto en el que Ricciardo retomó el liderato que había dejado en la vuelta 23, pero el gusto le duró poco, pues en el giro 32 vino la debacle para el australiano y Red Bull, quienes pendientes de la estrategia de Mercedes con Hamilton, decidieron ir por gomas súper suaves usadas para afrontar el resto de la competencia.
Lo que no tenían contemplado terminó por ocurrir, pues al momento en el que Ricciardo llegó al box de la escudería austriaca, los mecánicos no tenían preparados los neumáticos, lo cual le costó segundos valiosos y la carrera, pues al salir de los pits, Hamilton ya había pasado al australiano, quien durante el resto de la carrera se dedicó a perseguir al británico, estando cerca de superarlo en contadas ocasiones, aunque fracasando en el intento, a pesar de que la amenaza de lluvia se hizo más latente sobre la recta final de la competencia.
Con ello, Hamilton cerró la lucha por el título con Nico Rosberg, al ubicarse a 24 puntos de distancia, luego de llegar a 84 contra los 106 del alemán, quien terminó ubicado en el séptimo sitio. Daniel Ricciardo, con su segundo puesto, se metió en el Top 3 del campeonato, al llegar a 66 unidades, pero con el amargo sabor de saberse “saboteado” por su propio equipo.
Seis, el número mágico
Un arranque de temporada nada halagüeño se disipó por completo en la carrera insigne de la máxima categoría del deporte motor.
Lo que pintaba para ser un año complicado después de no sumar puntos en las primeras tres carreras, se borró después de 78 vueltas para el tapatío Sergio Pérez Mendoza, que ayer cruzó la meta en el tercer sitio de un Gran Premio de Mónaco lleno de drama y momentos inesperados.
El piloto tapatío de Force India regresa a los primeros planos de la Fórmula Uno después de poco más de siete meses desde su anterior incursión entre los triunfadores de un Gran Premio, cuando el pasado 11 de octubre de 2015, en Sochi, Rusia, donde también concretaba un tercer sitio.
En medio de un festival de errores, Sergio Pérez jugó un papel importante y se puso el traje de protagonista de la carrera, especialmente al ejecutar a la perfección una estrategia que maquinada por él mismo y su equipo rindió frutos desde el momento en el que se decidió ponerla en marcha.
Se le borró la sonrisa a Ricciardo
El piloto australiano Daniel Ricciardo (Red Bull), segundo en el Gran Premio de Mónaco después de haber salido desde la pole reconoció que se siente como si le hubiera pasado “un camión por encima”, después del error de su equipo en una parada que le costó el primer puesto.
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