Las otras ‘caras’ de Xavier Villaurrutia a 113 años de su nacimiento

Aunque es más conocido por sus grandes obras poéticas, entre las cuales figura el libro “Nostalgia de la muerte”, Xavier Villaurrutia (1903-1950) fue mucho más que eso, también se desarrolló como crítico de cine y guionista, lo cual ha comenzado a ser valorado.
Así lo deja ver la Secretaría de Cultura federal, en un comunicado en el que se habla además de su paso por el teatro mexicano, sus ideas literarias y filosóficas, su labor como crítico y algunas aportaciones al cine.
Según consta en un libro en el que el bardo publicó casi 200 críticas publicadas en algunas revistas entre 1937 y 1942, sobre esta actividad, Villaurrutia veía la labor del crítico como una forma de ayudar a ver al espectador.
“El crítico no debe cohibirse a la hora de expresar su verdadero sentir ante aquello que juzga. No importa que a veces –como sucede en el caso de la valoración de films mexicanos- se llegue a acusar al crítico de traidor a la patria”, consideraba. De acuerdo con una investigación realizada por Miguel Capistrán, además de crítico, Villaurrutia también participó en el cine como guionista, debido quizá a su facilidad para los diálogos, derivada de su faceta de dramaturgo.
Un ejemplo de este trabajo está en la cinta “El monje blanco” (1945), de Julio Bracho, donde Villaurrutia hace los diálogos en verso.
Otras películas donde participó como guionista, según datos de Filmoteca UNAM, fueron “Cinco fueron escogidos”, de Herbert Kline (1942); “Vámonos con Pancho Villa”, de Fernando de Fuentes (1935), y “El espectro de la novia”, de René Cardona (1943), por mencionar sólo algunas. La Secretaría de Cultura federal recordó que en 2009, el Instituto Nacional de Bellas Artes adquirió el Fondo Xavier Villaurrutia que reúne manuscritos, originales mecanográficos, libretos, cuadernos de notas, dibujos, fotografías, objetos y una máscara mortuoria del poeta, de la autoría del escultor Ignacio Asúnsolo, que dan testimonio de parte del trabajo de este personaje.
Entre el material que alberga este importante fondo documental, a quien hoy se recuerda a 113 años de su nacimiento, se conservan proyectos, contratos, recibos y otros documentos relacionados con su labor en el cine mexicano.
En 2012 se adaptó como repositorio una pequeña sala en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia (Nuevo León No. 91, Colonia Condesa), que a la vez funge como exhibidor de una muestra representativa de los documentos que integran este archivo y funciona como sala de consulta.
Villaurrutia nació el 27 de marzo de 1903 en la Ciudad de México. Inició sus estudios en el Colegio Francés de la Ciudad de México, más tarde, en la Escuela Nacional Preparatoria, inició su amistad con Salvador Novo y Jaime Torres Bodet.
Comenzó estudios superiores de derecho, que luego abandonó para dedicarse por completo a las letras. Hizo estudios de teatro en el Departamento de Bellas Artes. Becado en 1935 por la Fundación Rockefeller, estudió arte dramático durante un año en la Universidad de Yale de New Haven, Connecticut, Estados Unidos (en compañía de Rodolfo Usigli). Formó parte del grupo llamado Los contemporáneos, que se definían a sí mismos como «grupo sin grupo» y miembro fundador de la revista Contemporáneos. Dirigió, junto con Salvador Novo, la revista Ulises y junto con Rafael López Pérez, Barandal. Inspirado en la obra de López Velarde, pero influido definitivamente por el surrealismo, su obra poética se distinguió por su oscuridad y sus referencias a imágenes de abandono, de desolación, y de una presencia y relación constante con la muerte. Sus trabajos más destacados son Primeros poemas, Reflejos (1926), Nocturnos (1933), Nostalgia de la muerte (1938), Décima muerte (1941) y Cantos a la primavera y otros poemas (1948).