*.- Ruedan cabezas desleales en el Cobach *.- Vega frustró plan en su contra *.- Calma y paz en la UASLP

A cinco semanas de su arribo a la Dirección General del Colegio de Bachilleres, el doctor Amado Vega Robledo comenzó a descabezar al grupo que por 30 años hizo y deshizo en el Subsistema de Educación Media Superior, empezando por que eran ellos quienes decidían a quien nombraban director.
Esa cadena de mando se rompió cuando hace 5 semanas, sin consultarlos y bajo la presión sindical que exigía el cese del ingeniero Mónico Jiménez Medina, el gobernador Juan Manuel Carreras lo nombró nuevo director general, una vez que el sindicato mayoritario, el SITCOBACHSLP, le diera el visto bueno a su impresionante currículum.
Cuatro semanas tardó Vega Robledo en elaborar un diagnóstico y algo así como un plan de remediación de las condiciones del Bachillerato mejor calificado de nuestra entidad, pese al desorden financiero y administrativo en que lo dejó su inmediato antecesor.
El documento llegó a manos del gobernador Juan Manuel Carreras, que le dio todo su apoyo y así, la semana pasada llamó a los cabecillas de ese grupo para informarles que como sus nombramientos carecían de validez desde ese momento carecen de toda autoridad dado que él daría nuevos nombramientos.
COMO UNIVERSIDAD
Por ejemplo, había un “Secretario General” que en realidad hacía funciones académicas, y un Coordinador de Materia que no sólo carecía del requisito de la licenciatura, sino que incluso ganaba más que el propio director general, lo que por ley no es posible. Vega los conminó a regresar a sus plazas o arroparse a un programa institucional de jubilaciones al que por antigüedad todos tienen derecho.
Aparentemente todos aceptaron la propuesta de retiro sin chistar y Vega se lo notificó a los directores de planteles. Pero por su lado el sábado el grupo se juntó con los Coordinadores para llamar a todos los directores invitándolos a tomar el edificio del Cobach.
Acordaron tomarlo desde el domingo para que los planteles amanecieran paralizados el lunes pero… en ésta época de sorprendentes avances tecnológicos las cosas fueron del conocimiento del doctor Vega  qqqque en vez de disfrutar su día de descanso desde temprano se apersonó en el edificio junto con un Agente del MP y un Notario, que darían fé de la confabulación de sus “colaboradores” disidentes, a fin de poderles rescindir sus contratos con todas las de la Ley, por la simple causa de “pérdida de confianza”.
Ignoramos si alguien llamó a los directores para darles alguna contraorden, pues telefónicamente t-o-d-o-s habían aceptado sumarse al plan, pero el caso es que la primera, y única en llegar, fue la esposa del ex director, Mónico Jiménez Medina, Laura Cristina Torres, que se apareció a las puertas del Cobach pasadito el mediodía.
UN CHASCO
Dicen que golpeó la reja para que “los de adentro” le vinieran a abrir y cuando vio que era el doctor Vega quien le venía a abrir mientras le preguntaba que si le podía servir en algo, la directora al Cobach 28 pegó la carrera como alma que lleva el Diablo se metió a su carro y nadie la pudo alcanzar, en una “graciosa ¿o ridícula? huida”.
Cuando los coordinadores llegaron el lunes a trabajar, se encontraron con que a partir de ese día el horario de oficina se ampliaba con un turno vespertino, de 5 a 7 pm además del ya establecido de 8 a 3. ¡Dos horas más y casi todo el día!
Todos los lunes había “reunión de evaluación” y este lunes, cuando los coordinadores de las cuatro zonas ya estaban presentes, el doctor Vega sólo les mostró una carpeta “con las pruebas de cómo utilizaron bienes del Colegio de Bachilleres para su pretendida toma del edificio y con voz de acero les advirtió: “Ustedes intervinieron en ese plan, saben muy bien que hicieron mal y que su conducta traerá consecuencias”, y los mandó a trabajar. ¡Sopas! El ex diputado sacó la casta y todos supieron que de blando y tonto no se le puede encontrar un pelo. Al costo.
CALMA EN LA UASLP
A casi dos meses de que el Consejo Directivo Universitario, CDU, defina si el arquitecto Manuel Fermín Villar Rubio es reelecto para un nuevo rectorado, la UASLP transita por un periodo relajado, de calma y paz.
Ningún director de escuela o facultad ha externado su interés por postularse a la rectoría y al contrario, entre los universitarios hay muchas expresiones a favor de una reelección.
Maestros de diversas escuelas coinciden en que para evitar innecesarias desestabilizaciones, el Estatuto ya debería contemplar que los rectorados sean de 8 años sin posibilidad de reelección a fin de que tampoco sea posible la instalación de cacicazgos a este nivel
La importancia del rectorado actual, reside en que sólo la ratificación para un periodo más, garantiza la continuidad y conclusión de la internacionalización del Alma Máter, imprescindible para su vigencia y pertinencia en un mundo global.
En éste marco,  21 de los 24 directores de escuelas y facultades de la UASLP ya tuvieron reuniones con el arquitecto Villar para pedirle que presente al CDU su petición para un nuevo periodo. Los restantes no lo han hecho debido a la apretada agenda del rector por lo que, al parecer, en nuestra Máxxima Casa de Estudios solo soplan vientos de reelección.
Y, no sin antes consignar que en el “Ugaldazo”de la semana pasada hay un fuerte olor a “fuego amigo” que al menos de modo interno debieran esclarecer para tener claro quien es quién; aquí nos leemos en otro BURÓ POLÍTICO el próximo domingo.