Cosas de la Ciudad

TORITO POTOSINO.- Debido a que las multas por conducir en estado de ebriedad sólo han producido corrupción entre los agentes de tránsito, pero no ha logrado disminuir el número de accidentes viales por este motivo, Oscar Vera propuso la implementación en San Luis Potosí del “Torito”, tal y como funciona en el Distrito Federal, la hoy flamante Ciudad de México.
ARRESTOS.- Dijo que la persona que sea sorprendida conduciendo en estado en estado inconveniente, luego de que esto fuera constatado, sería trasladado al “Torito” en donde permanecería detenido 24, 36 y hasta 72 horas para los residentes, sin derecho a obtener su libertad previo pago de una sanción administrativa.
SIN IMPUNIDAD.- El “Torito” sería para todos los potosinos que incurra en esta grave falta, causante de muchas tragedias que han enlutado a familias potosinas, desde el gobernador para abajo, afirmó Vera Fabregat, quien precisó que de esta manera se terminaría con las “mordidas” de varios miles de pesos que piden los agentes para no levantar la infracción y llevarse al conductor detenido.
CELULARES.- Siguiendo con el tema de las infracciones viales, prácticamente nadie obedece el reglamento que prohíbe a los automovilistas hablar por teléfono mientras conducen. Señalar que las mujeres son las que más hablan sería una mentira, pues lo mismo hacen los hombres. Desde esta columna les sugerimos a nuestros lectores que hagan un ejercicio y del trayecto de su casa a su centro de trabajo o viceversa cuente cuántos conductores se encuentra con el celular en la oreja mientras conducen con una mano. Se sorprenderá del resultado.
TAMAULIPECOS HASTA LAS CACHAS.- Y luego dicen que no, pero tal parece que el general Arturo Gutiérrez García, secretario de Seguridad Pública del Estado, se trajo a San Luis Potosí no sólo a ex policías de Tamaulipas, sino también a su gente de prensa de esa entidad, como lo demuestra el hecho de que en el boletín que manejó ayer, con el encabezado: “Analizan tema de seguridad general Arturo Gutiérrez y empresarios potosinos”, en el tercer párrafo escribieron: destacó la importancia de trabajar en varios frentes para fortalecer la seguridad que los tamaulipecos merecen. Una pregunta, ¿estamos en San Luis o Tamaulipas?, o será que el gentilicio de los potosinos se cambio por tamaulipecos.
AUTOGOL.- Pero no sólo el área de prensa de la SSPE no se percató de este error, sino que también pasó desapercibido para Comunicación Social del Gobierno del Estado, pues ellos también así lo enviaron. Nos podrán decir que fijados, pero hacemos el comentario porque fueron dos las áreas de prensa estatales las que tuvieron este traspié, no de dedo sino de gentilicio. Horas después, cuando al parecer se percataron del garrafal error, se volvió a enviar el boletin «ya corregido» en donde ya se menciona a San Luis Potosí. Es por demás.
APAGÓN ANALÓGICO.- Se llevó a cabo el “apagón analógico” en nuestra entidad, por última vez se vieron las imágenes televisivas en los aparatos analógicos la medianoche del martes, al menos los que no fueron adaptados con decodificadores. Ayer los potosinos nos encontramos que ya no llega la señal, aunque como se tuvo mucho tiempo para reemplazar los aparatos analógicos, la verdad es que se estima que al menos un 10% de los potosinos no cuenta con ningún tipo de aparato o aditamento para poder recibir la señal de la televisión libre, aunque de hecho no son pocas las personas que dan gracias a esta coyuntura porque les permitirá ya no ver más la llamada “telebasura”.
HAGAN CASO.- No estaría por demás hacer caso a lo que pide el vocero de la arquidiócesis, Juan Jesús Priego Rivera, en no tomar como pretexto las fiestas decembrinas, las posadas, para abusar del consumo de bebidas embriagantes, considera que está bien tonar una copa o dos, pero no más, no se trata de emborracharse en nombre de Dios. Son fechas que ya no pocas personas han perdido el sentido de lo que en realidad se trata; de reconciliación, de fomentar la buena vecindad. Que estas fechas no pierdan el valor específico y verdadero de la celebración. Aunque en verdad es algo difícil, pues la gente es bombardeada con “ofertas y promociones” de productores de bebidas alcoholizas.